Capítulo 107
Ya es diecisiete de septiembre, y estamos David y yo, en casa de Lorena, visitando a su pequeñín. También está Blas, hoy, haciendo de cocinero.
-Y bueno, ¿qué hay de vosotros? -pregunto.
-Bien -sonríe Lorena mirando a Blas, que está en la cocina- Es un cielo, es más cariñoso con Aarón... Lo trata como si fuera su hijo.
-Pero entonces, ¿estáis juntos?, como pareja, me refiero -pregunta David, directamente.
-Se podría decir que sí -reconoce Lorena.- Pero cada uno vive en su casa.
-¿Y cómo va Aarón? -pregunto- ¿Anda ya?
-Lo intenta -dice- Se agarra a los muebles. Me lo tiene todo de manos... -dice sonriendo.- Me dejo las manos limpiando, hija.
-Bueno, al menos, tienes un cocinero. Y encima es guapísimo -le digo sonriendo.
-Eso no te lo discuto -sonríe.
-¡Venga! ¡Que ya está lista la comida! -exclama Blas.
Va trayendo los platos a la mesa del salón. Va por el cuarto cuando, sin querer, se le cae uno en el pie, que lleva al descubierto con unas chanclas.
-¡Ah! -exclama- Dios, cómo quema. -dice sacudiendo el pie.
-¿Estás bien? -le pregunta Lorena corriendo hacia él.
-Sí, sí -dice parpadeando bastante. Creo que intenta no llorar.- Aunque me duele muchísimo.
-Anda, cielo, ve a enjuagarte el pie. Te llevaré una toalla -dice yendo hacia su habitación- ¿Sabes dónde está el cuarto de baño, ¿no?
-Sí.
-Si hay algo que podamos hacer... -digo.
-No, por favor, sois nuestros invitados. Sentaos y comenzad a comer, de verdad, no pasa nada. -dicho esto, desaparece al fondo del pasillo.
-Voy a limpiar esto. ¿Qué puedo usar? -dice David yendo hacia la cocina.
-Papel de cocina. Yo voy a por la fregona, para que no se quede el suelo pringoso. -digo yendo hacia el baño.
-Siento haberla liado -se disculpa Blas en el baño.
-No te preocupes, no es tu culpa. -dice Lorena.
-Sí, sí que lo es. Llevo viviendo aquí dos días, y ya la he liado cuatro veces. Además, todavía no sé darle el biberón a Aarón.
Obviamente, después de este comentario de Blas, decido quedarme a escuchar. Sé que está mal, pero no lo puedo evitar.
-En realidad, darle el biberón es muy difícil -reconoce Lorena- No se está quieto.
-¿Y si no soy buen padre? -pregunta.
-Qué tontería más grande, cielo. Pues claro que lo serás, sólo te falta práctica. No es lo mismo prepararte para ser padre, como hizo Juan, que te pille de imprevisto, como a ti. Pero lo estás haciendo muy bien, créeme.
-Gracias, cariño, te quiero.
-Y yo a ti.
-Ya no hace falta que traigas la fregona, lo he limpiado todo yo -susurra David detrás mía con un tono enfadado. Le indico con una señal que ande hacia el salón.
-Lo siento, es que les estaba escuchando. -susurro- Se quieren. -digo con una sonrisa bobalicona.
-¿Y? -pregunta.
-Que se quieren gracias a mí. Qué bonito. Soy como cupido, pero en persona.
-Ya claro.
A los cinco minutos vienen Blas y Lorena.
-Sentimos haber tardado tanto -se disculpa Lorena.
-No os preocupéis, de verdad. ¿Cómo estás, Blas? -pregunto- Pero dime la verdad.
-Sinceramente, me duele. -dice sentándose a comer con una bolsa de hielo puesta en el pie.- Aunque menos que antes. Comienza a comer cuando dirige la mirada hacia el pequeño- Aarón, estás...
-¡Está andando! -exclama Lorena, feliz.- ¡Sus primeros pasos!
Todos nos levantamos de la mesa y vemos al pequeño Aarón andando, intenta guardar el equilibrio y, poco a poco, lo consigue. Se acerca a Blas, que también se ha levantado para presenciar este momento, Aarón sube sus bracitos para abrazarlo.
-¡Ay, mi niño! -exclama cogiéndolo en brazos y pegándolo contra él. Él sonríe con una sonrisa preciosa, auténtica, y añade un 'Papá'.
Blas se da cuenta, Lorena está llorando, supongo que de emoción.
Lleva a Aarón con ella y se lo pasa.
-¡Ay, mi rey, que ya ha dado su primeros pasitos! -exclama, feliz.- Os quiero a los dos -les dice a Blas y a su hijo.
-Ahora tienes que tener cuidado, Lorena -bromea David- Ya no hay quien lo pare.
Los tres se abrazan, y yo no puedo evitar emocionarme y que se me salten algunas lagrimillas.
-¿Nosotros seremos tan felices? -me pregunta David, al oído.
-Seguro que sí.
Historia de una chica de 14 años que consigue cumplir su sueño de ser cantante gracias a unos pequeños héroes...
jueves, 31 de octubre de 2013
miércoles, 30 de octubre de 2013
Capítulo 106
Capítulo 106
-A ver, ¿qué te ha pasado? -me pregunta cuando me he tranquilizado.
Le cuento todo. Toda mi vida. Desde cuándo conocía a Esme, lo que pasó con David, el por qué seguía siendo mi amiga a pesar de que le hubiera ocultado que participé en le videoclip, todo.
-Vaya, si que es complicado el tema este -dice.
-Lo siento mucho -me disculpo- Todo ha sido por mi culpa, siempre lo es.
-Eh, pequeña, no digas eso. No es tu culpa -susurra- La culpa la tiene la chica esa.
-Pero, por mi culpa, mi hermano tendrá que dejar el instituto. -sollozo.
-No tiene por qué -dice- Él puede seguir aquí, y tú puedes estudiar en casa, como hacían Álvaro y Carlos con la universidad.
-Bueno...
-Oye, no llores más -dice secándome las lágrimas con el dedo pulgar.
-Pero hay una chica auryner que se ha enterado.
-¿Y cómo ha reaccionado? -pregunta.
-No lo sé, pero creo que no se lo ha creído.
-Pues entonces, ya está, no pasa nada. -dice pasándome un brazo por los hombros.- No te preocupes, ¿vale? -me dice, yo asiento.- Anda, vamos a casa.
-¿Y mi hermano?
-Lo he mandado para allá, no te preocupes. Es que ha tenido que ir a comprar libretas, libros y material. -me informa.
-¿Y si nos ve alguien?
-Tengo el coche fuera. No te preocupes más, anda.
Cuando llego a casa acompañado de Dani, mi pastelito es el primero en abrazarme.
-Siento haberte dejado sola, princesa. No debí haberlo hecho -se lamenta en mi oído.
-No te preocupes, no es culpa tuya. Además, no podías haber hecho nada para evitarlo. -le respondo intentando parecer tranquila.
-No debí haber sido tan tonto -sigue- Le seguí el juego, y por eso me besó, lo peor es que se lo va contando a todo el mundo.
-Que no es culpa tuya, cielo.
-No debí haber ido a por el pasaporte, tendría que haberlo dejado para otro día.
¿Pasaporte? ¿Qué pasaporte?
-¿Qué pasaporte, David? -pregunto.
-Es que, bueno, de vacaciones, me gustaría irme a ver a mi familia, y después a Florida. Siento no habértelo dicho antes, te puedes venir, si quieres. -dice.
-No. Ve tú solo -le digo con una sonrisa.
-¿No te importa? -pregunta.
-Claro que no -sonrío- Pero ten cuidado, ¿vale?
-Gracias, amor. Si quieres, puedes venir a visitar a mi familia.
-¿Estará tu hermana? -pregunto.
-Sí. Y habrá una piscina. También vendrán amigos, ¿te apuntas?
-¡Claro! -exclamo.
Ya se me ha pasado la tristeza de hace unos días.
-Anda, ven, vamos a ver una peli -le digo- ¿Cuál quieres?
-Mmmm Gru -dice con una sonrisa.
-Está bien.
Voy hacia la estantería donde estuvo rebuscando Aarón el otro día, y escojo Gru: Mi villano favorito, la pongo en el lector de DVD, y comenzamos a ver la peli.
Como yo no la había visto antes, estoy muy atenta, al contrario que David, que a la media hora se queda dormido sobre mi regazo. Supongo que habrá tenido que madrugar para hacerse el pasaporte. Mientras tanto, observo su carita. Dormido está más dulce, y no es un torbellino, como cuando está despierto. Me permito pasarle la mano por sus rizos oscuros. Se nota que ha dormido aquí la siesta, esperándome, como yo en el cuarto de baño del instituto. ¿Será la primera y última vez que vaya? La verdad es que no lo sé. De todas maneras, tampoco es que haya hecho muchos amigos, ¿no?
Le doy un beso a David en la cabeza.
-Te quiero -le susurro.
-A ver, ¿qué te ha pasado? -me pregunta cuando me he tranquilizado.
Le cuento todo. Toda mi vida. Desde cuándo conocía a Esme, lo que pasó con David, el por qué seguía siendo mi amiga a pesar de que le hubiera ocultado que participé en le videoclip, todo.
-Vaya, si que es complicado el tema este -dice.
-Lo siento mucho -me disculpo- Todo ha sido por mi culpa, siempre lo es.
-Eh, pequeña, no digas eso. No es tu culpa -susurra- La culpa la tiene la chica esa.
-Pero, por mi culpa, mi hermano tendrá que dejar el instituto. -sollozo.
-No tiene por qué -dice- Él puede seguir aquí, y tú puedes estudiar en casa, como hacían Álvaro y Carlos con la universidad.
-Bueno...
-Oye, no llores más -dice secándome las lágrimas con el dedo pulgar.
-Pero hay una chica auryner que se ha enterado.
-¿Y cómo ha reaccionado? -pregunta.
-No lo sé, pero creo que no se lo ha creído.
-Pues entonces, ya está, no pasa nada. -dice pasándome un brazo por los hombros.- No te preocupes, ¿vale? -me dice, yo asiento.- Anda, vamos a casa.
-¿Y mi hermano?
-Lo he mandado para allá, no te preocupes. Es que ha tenido que ir a comprar libretas, libros y material. -me informa.
-¿Y si nos ve alguien?
-Tengo el coche fuera. No te preocupes más, anda.
Cuando llego a casa acompañado de Dani, mi pastelito es el primero en abrazarme.
-Siento haberte dejado sola, princesa. No debí haberlo hecho -se lamenta en mi oído.
-No te preocupes, no es culpa tuya. Además, no podías haber hecho nada para evitarlo. -le respondo intentando parecer tranquila.
-No debí haber sido tan tonto -sigue- Le seguí el juego, y por eso me besó, lo peor es que se lo va contando a todo el mundo.
-Que no es culpa tuya, cielo.
-No debí haber ido a por el pasaporte, tendría que haberlo dejado para otro día.
¿Pasaporte? ¿Qué pasaporte?
-¿Qué pasaporte, David? -pregunto.
-Es que, bueno, de vacaciones, me gustaría irme a ver a mi familia, y después a Florida. Siento no habértelo dicho antes, te puedes venir, si quieres. -dice.
-No. Ve tú solo -le digo con una sonrisa.
-¿No te importa? -pregunta.
-Claro que no -sonrío- Pero ten cuidado, ¿vale?
-Gracias, amor. Si quieres, puedes venir a visitar a mi familia.
-¿Estará tu hermana? -pregunto.
-Sí. Y habrá una piscina. También vendrán amigos, ¿te apuntas?
-¡Claro! -exclamo.
Ya se me ha pasado la tristeza de hace unos días.
-Anda, ven, vamos a ver una peli -le digo- ¿Cuál quieres?
-Mmmm Gru -dice con una sonrisa.
-Está bien.
Voy hacia la estantería donde estuvo rebuscando Aarón el otro día, y escojo Gru: Mi villano favorito, la pongo en el lector de DVD, y comenzamos a ver la peli.
Como yo no la había visto antes, estoy muy atenta, al contrario que David, que a la media hora se queda dormido sobre mi regazo. Supongo que habrá tenido que madrugar para hacerse el pasaporte. Mientras tanto, observo su carita. Dormido está más dulce, y no es un torbellino, como cuando está despierto. Me permito pasarle la mano por sus rizos oscuros. Se nota que ha dormido aquí la siesta, esperándome, como yo en el cuarto de baño del instituto. ¿Será la primera y última vez que vaya? La verdad es que no lo sé. De todas maneras, tampoco es que haya hecho muchos amigos, ¿no?
Le doy un beso a David en la cabeza.
-Te quiero -le susurro.
martes, 29 de octubre de 2013
Capítulo 105
Capítulo 105
-¿Esme? -pregunto, atónita.
-Sí, de Esmeralda. ¿Nunca lo habías oído?
-Bueno, sí, un poco... -murmuro, insegura de lo que decir.
-Pues la verdad es que no me creo que se haya liado con el David ese. -dice más seria- Es que es imposible. Dice que tenía una amiga que se era su novio y se lo quitó, o algo así, pero yo no me lo creo. -nos quedamos las dos un rato calladas- ¿Y tú? -me pregunta.
-No mucho, la verdad.
-Enana -me dice mi hermano interrumpiendo nuestra conversación- Ven, anda, que tengo que hablar contigo.
Me levanto de la silla, y me voy al lado de la pizarra a hablar con Eloy, mi hermano.
-Dime -le digo.
-Creo que me han reconocido -dice- Hay fans mías en segundo de la E.S.O -continúa- Se me han quedado mirando. Ha sido una mala idea esto de venir al colegio, ¿eh? -me dice.
-Pues agárrate. Resulta que Esme está aquí, en D.
-¿Y?
-¿Cómo que y? Pues que se lió con David y lo va contando por ahí. Si te ve y te reconoce, se dará cuenta de que estoy aquí y abrirá la boca. No podemos seguir en este instituto.
-Joder -murmura.- ¿Qué hacemos? -pregunta- ¿Vamos a hablar con el director, o algo?
-Vamos a terminar el día, y si pasa lago, ya lo hablamos con el director. -sugiero.
-Vale.
-Coral, ven -dice Belén cogiéndome la mano y sacándome al pasillo- Mira, esta es Coral -le dice a una chica rubia.
-¿Coral? -pregunta mirándome de arriba abajo- ¡Cuánto tiempo, amiga!
Dios, encima de amigas de toda la vida.
-¿Sabes? -dice Belén- Es auryner, pastelita, en concreto. Como tú.
-Sí, qué bien, bueno...
-Dice que se lió con David, pero fijo que es mentira -dice Belén.
-¡Que es verdad! -exclama Esme- Además, Coral lo sabe.
-¿Quién? ¿Yo? -pregunto.
-Sí. Lo viste, y te enfadaste con David. Rompisteis por mi culpa, ¿verdad? -sonríe maliciosamente.
No puedo creer que lo esté contando. Ahora se enterará Belén, que se lo dirá a todo el colegio. Se darán cuenta de que estoy con David y todo se irá a la mierda. Por mi culpa.
-No lo entiendo -dice Belén- ¿Cómo va a hablar Coral con David? Si no lo conoce. ¿Has ido a alguna firma, o algo? -me pregunta.
-No...
-A ver, chica -le dice a Belén- A ver si abres los ojos de una vez. ¿No te parece demasiada coincidencia que se llame Coral, que sea auryner, que tenga la misma estatura, y que se parezca? -Belén sigue sin darse cuenta- A ver, dame las gafas -dice quitándomelas sin permiso- Ahora, Belén, cámbiale el color del pelo a castaño claro. ¿A quién tenemos?
-A Coral... -murmura.
-En fin -prosigue Esme- Esta, está con David, al que besé, y por eso se enfadaron y rompieron. Lo que no sé decirte es si están ahora juntos. A eso te puede responder ella misma, ¿no? -dice cruzándose de brazos.
-Mira, déjame, y no hables si no estás segura de las cosas -le digo intentando ir hacia el baño, que está enfrente.
-¿Ves? -pregunta Esme, otra vez- Eso es que está con él, pero no lo quiere decir. ¿Te la imaginas liándose con David? ¿Y si han...?
Se acabó. No puedo seguir aguantando esto más. Como puedo, aparto a Esme de delante mía, y voy hacia el baño, donde me encierro y echo el pestillo. Me derrumbo al suelo y me pongo a llorar.
Maldita Esme. Si no fuera por su culpa estaría genial, Auryn no correría peligro, y nunca me hubiera peleado con David. Saco mi móvil del bolsillo del pantalón y le envío un mensaje a Eloy:
Lloro todo lo que puedo, hasta que me quedo dormida apoyada en la pared.
Al rato, me despiertan unos golpes en la puerta, y unas voces:
-¡Coral, abre, soy el director! -grita.- Por favor, abre. No hay alumnos en el instituto, no tiene de qué preocuparse.
¿Dónde estoy? Ah, sí. En el colegio, en el baño. Todo por culpa de Esme, otra vez.
-Coral, abre la puerta, por favor -exclama mi hermano.
-Coral, por favor, abre la puerta -repite otra vez el profesor.
-Coral, coral -dice una voz de uno de mis cinco chicos. Dani- Coral, abre, por favor.
Sigo sin abrir. ¿Qué pasará ahora? Tendré que enfrentarme a ellos. Y, por mi culpa, mi hermano tendrá que volver a recibir clases en casa.
Me acerco a la puerta, y pego la oreja a ella. Escucho a Dani diciéndoles algo a el director y a mi hermano: 'Dejadnos solos', creo.
-Coral, estamos solos, se han ido -me dice a los treinta segundos aproximadamente. Sigo sin abrir- Venga, sal, que no te voy a besar, ni nada de eso. -bromea.- Vale, siento lo de la otra noche en el coche, ¿eh? No lo volveré a hacer. -se disculpa- ¿Quieres hablar?
Sin decir nada, quito el pestillo y abro la puerta. Cuando me ve llorando, abre los brazos y me lanzo hacia él, volviendo a romper a llorar.
-Venga, ya está -dice pasándome ambos brazos por la espalda.
-¿Esme? -pregunto, atónita.
-Sí, de Esmeralda. ¿Nunca lo habías oído?
-Bueno, sí, un poco... -murmuro, insegura de lo que decir.
-Pues la verdad es que no me creo que se haya liado con el David ese. -dice más seria- Es que es imposible. Dice que tenía una amiga que se era su novio y se lo quitó, o algo así, pero yo no me lo creo. -nos quedamos las dos un rato calladas- ¿Y tú? -me pregunta.
-No mucho, la verdad.
-Enana -me dice mi hermano interrumpiendo nuestra conversación- Ven, anda, que tengo que hablar contigo.
Me levanto de la silla, y me voy al lado de la pizarra a hablar con Eloy, mi hermano.
-Dime -le digo.
-Creo que me han reconocido -dice- Hay fans mías en segundo de la E.S.O -continúa- Se me han quedado mirando. Ha sido una mala idea esto de venir al colegio, ¿eh? -me dice.
-Pues agárrate. Resulta que Esme está aquí, en D.
-¿Y?
-¿Cómo que y? Pues que se lió con David y lo va contando por ahí. Si te ve y te reconoce, se dará cuenta de que estoy aquí y abrirá la boca. No podemos seguir en este instituto.
-Joder -murmura.- ¿Qué hacemos? -pregunta- ¿Vamos a hablar con el director, o algo?
-Vamos a terminar el día, y si pasa lago, ya lo hablamos con el director. -sugiero.
-Vale.
-Coral, ven -dice Belén cogiéndome la mano y sacándome al pasillo- Mira, esta es Coral -le dice a una chica rubia.
-¿Coral? -pregunta mirándome de arriba abajo- ¡Cuánto tiempo, amiga!
Dios, encima de amigas de toda la vida.
-¿Sabes? -dice Belén- Es auryner, pastelita, en concreto. Como tú.
-Sí, qué bien, bueno...
-Dice que se lió con David, pero fijo que es mentira -dice Belén.
-¡Que es verdad! -exclama Esme- Además, Coral lo sabe.
-¿Quién? ¿Yo? -pregunto.
-Sí. Lo viste, y te enfadaste con David. Rompisteis por mi culpa, ¿verdad? -sonríe maliciosamente.
No puedo creer que lo esté contando. Ahora se enterará Belén, que se lo dirá a todo el colegio. Se darán cuenta de que estoy con David y todo se irá a la mierda. Por mi culpa.
-No lo entiendo -dice Belén- ¿Cómo va a hablar Coral con David? Si no lo conoce. ¿Has ido a alguna firma, o algo? -me pregunta.
-No...
-A ver, chica -le dice a Belén- A ver si abres los ojos de una vez. ¿No te parece demasiada coincidencia que se llame Coral, que sea auryner, que tenga la misma estatura, y que se parezca? -Belén sigue sin darse cuenta- A ver, dame las gafas -dice quitándomelas sin permiso- Ahora, Belén, cámbiale el color del pelo a castaño claro. ¿A quién tenemos?
-A Coral... -murmura.
-En fin -prosigue Esme- Esta, está con David, al que besé, y por eso se enfadaron y rompieron. Lo que no sé decirte es si están ahora juntos. A eso te puede responder ella misma, ¿no? -dice cruzándose de brazos.
-Mira, déjame, y no hables si no estás segura de las cosas -le digo intentando ir hacia el baño, que está enfrente.
-¿Ves? -pregunta Esme, otra vez- Eso es que está con él, pero no lo quiere decir. ¿Te la imaginas liándose con David? ¿Y si han...?
Se acabó. No puedo seguir aguantando esto más. Como puedo, aparto a Esme de delante mía, y voy hacia el baño, donde me encierro y echo el pestillo. Me derrumbo al suelo y me pongo a llorar.
Maldita Esme. Si no fuera por su culpa estaría genial, Auryn no correría peligro, y nunca me hubiera peleado con David. Saco mi móvil del bolsillo del pantalón y le envío un mensaje a Eloy:
'Estoy en el baño, no vengas por mí hasta que se vayan todos los del instituto. Invéntate una excusa'
Lloro todo lo que puedo, hasta que me quedo dormida apoyada en la pared.
Al rato, me despiertan unos golpes en la puerta, y unas voces:
-¡Coral, abre, soy el director! -grita.- Por favor, abre. No hay alumnos en el instituto, no tiene de qué preocuparse.
¿Dónde estoy? Ah, sí. En el colegio, en el baño. Todo por culpa de Esme, otra vez.
-Coral, abre la puerta, por favor -exclama mi hermano.
-Coral, por favor, abre la puerta -repite otra vez el profesor.
-Coral, coral -dice una voz de uno de mis cinco chicos. Dani- Coral, abre, por favor.
Sigo sin abrir. ¿Qué pasará ahora? Tendré que enfrentarme a ellos. Y, por mi culpa, mi hermano tendrá que volver a recibir clases en casa.
Me acerco a la puerta, y pego la oreja a ella. Escucho a Dani diciéndoles algo a el director y a mi hermano: 'Dejadnos solos', creo.
-Coral, estamos solos, se han ido -me dice a los treinta segundos aproximadamente. Sigo sin abrir- Venga, sal, que no te voy a besar, ni nada de eso. -bromea.- Vale, siento lo de la otra noche en el coche, ¿eh? No lo volveré a hacer. -se disculpa- ¿Quieres hablar?
Sin decir nada, quito el pestillo y abro la puerta. Cuando me ve llorando, abre los brazos y me lanzo hacia él, volviendo a romper a llorar.
-Venga, ya está -dice pasándome ambos brazos por la espalda.
lunes, 28 de octubre de 2013
Capítulo 104
Capítulo 104
-Hola -saludo a Belén en el recreo.- ¿Qué tal te ha ido?
-Bien, ¿y a ti?
-Bien. Aunque a mi hermano le ha ido mejor, la verdad. Él lo ha tenido más fácil.
-Hombre, los chicos es hablar de fútbol, y listo, pero las chicas... -opina.
-Es más complicado.
-Ya ves -coincide.
Estamos un grupito de seis: Belén, una amiga suya, Sara, Fernando, Noelia y yo.
-¿Tú cómo te llamas? -le pregunto a la amiga de Belén.
-Ainara -responde.- ¿Y tú?
-Coral.
-¿Coral? -pregunta, extrañada- Qué nombre más raro.
-No tan raro, la chica de mi grupo favorito se llama así... -dice Belén. Todos la miramos extrañada- Bueno, ahora os voy a estar hablando las veinticuatro horas del día de mi grupo favorito.
-¿Cuál es? -preguntan todos.
-Auryn -responde con una sonrisa parecida a la mía cada vez que hablo de ellos.
-¡Dios! ¿Te gusta Auryn? -le pregunto sonriendo.
-¿Que si me gusta? ¡Me encanta!
-¿De verdad? ¡A mí también! -exclamo.
-Tía, qué fuerte -dice abrazándome. Me parece rara su reacción, aunque es fácil que no me reconozca. Llevo el pelo en tono cobrizo, liso, recogido en una coleta alta, y además me he puesto unas gafas de pega negras.- En mi otro colegio no había ninguna auryner.
En este momento, me veo obligada a abrazarla de verdad, aparte de que es mi fan, es una hermana. Una hermana auryner.
En ese momento, me coge de la mano, me lleva a un lugar detrás de una escalera y comenzamos a hablar de nuestro grupo favorito.
-¿Qué eres? -me pregunta.
-Pastelita, ¿y tú?
-Smiler, por supuesto. -dice señalando su camiseta de una sonrisa.- ¿Qué te parece que Coral esté en el grupo?
-Hombre, no sé...
-A mí me parece que hace bien, porque se la ve una chica maja. -opina- Algunas creen que está con David, yo creo que sí, pero por otra parte, también se la ve muy unida a los demás, eso despista.
-Hombre, por lo visto, era auryner antes de entrar en Auryn. Desde el principio -le informo.
-Es verdad. Pero, mira, que haga lo que quiera, mientras no le haga daño a nuestros chicos, me da igual. -dice encogiéndose de hombros.- ¿Has ido a My Camp Auryn alguna vez?
-Bueno, sí, hace tiempo.
-¿El primero? -pregunta.
En ese momento suena el timbre que anuncia el comienzo de clase, así que tenemos que dejar de hablar e irnos nuestras respectivas aulas.
Nada más subir las escaleras, entro a mi clase y voy hacia mi sitio, pero ahí está Noemí y un chico besándose. Me quedo congelada, de pie junto a la puerta.
-Tú tranquila, si no miras no te dará asco -me dice un chico.- Hola, soy Luis.
-Ah, hola. Soy Coral. -me presento.
-Eres nueva, ¿no?
-Sí.
Noelia coge a Luis del brazo y se lo llevo con él.
-Eso, emm, vale -se limita a decir mientras se lo lleva.
Noemí y el chico se separan, y el chico se va a su sitio, yo me quedo mirándolo.
-¿A que es muy guapo? -me pregunta, yo asiento porque, efectivamente, es muy guapo- Es mi novio, Pedro. -dice sonriendo- Ni se te ocurra quitármelo, ¿eh? -dice más seria.
-No, no -niego con la cabeza.
Noemí se va fuera de clase, al pasillo, al rato viene Sara, una chica con el pelo entre rubio, pelirrojo y moreno. Se sienta en la silla de Noemí.
-Hola -me saluda.
-Hola -sonrío.
-Como veo que eres nueva, te daré algunos consejos para que sepas dónde te has metido -dice hablando rápido y muy seria.- Hay una chica en D que es una hija de puta como nadie. Te gusta Auryn, ¿no? -pregunta.
-Sí. David, en concreto -respondo.
-La chica esa va por ahí diciendo que se ha liado con el tal David ése. -continúa.
-¿Qué? ¿Cómo se llama? -me pregunta.
-Esme.
-Hola -saludo a Belén en el recreo.- ¿Qué tal te ha ido?
-Bien, ¿y a ti?
-Bien. Aunque a mi hermano le ha ido mejor, la verdad. Él lo ha tenido más fácil.
-Hombre, los chicos es hablar de fútbol, y listo, pero las chicas... -opina.
-Es más complicado.
-Ya ves -coincide.
Estamos un grupito de seis: Belén, una amiga suya, Sara, Fernando, Noelia y yo.
-¿Tú cómo te llamas? -le pregunto a la amiga de Belén.
-Ainara -responde.- ¿Y tú?
-Coral.
-¿Coral? -pregunta, extrañada- Qué nombre más raro.
-No tan raro, la chica de mi grupo favorito se llama así... -dice Belén. Todos la miramos extrañada- Bueno, ahora os voy a estar hablando las veinticuatro horas del día de mi grupo favorito.
-¿Cuál es? -preguntan todos.
-Auryn -responde con una sonrisa parecida a la mía cada vez que hablo de ellos.
-¡Dios! ¿Te gusta Auryn? -le pregunto sonriendo.
-¿Que si me gusta? ¡Me encanta!
-¿De verdad? ¡A mí también! -exclamo.
-Tía, qué fuerte -dice abrazándome. Me parece rara su reacción, aunque es fácil que no me reconozca. Llevo el pelo en tono cobrizo, liso, recogido en una coleta alta, y además me he puesto unas gafas de pega negras.- En mi otro colegio no había ninguna auryner.
En este momento, me veo obligada a abrazarla de verdad, aparte de que es mi fan, es una hermana. Una hermana auryner.
En ese momento, me coge de la mano, me lleva a un lugar detrás de una escalera y comenzamos a hablar de nuestro grupo favorito.
-¿Qué eres? -me pregunta.
-Pastelita, ¿y tú?
-Smiler, por supuesto. -dice señalando su camiseta de una sonrisa.- ¿Qué te parece que Coral esté en el grupo?
-Hombre, no sé...
-A mí me parece que hace bien, porque se la ve una chica maja. -opina- Algunas creen que está con David, yo creo que sí, pero por otra parte, también se la ve muy unida a los demás, eso despista.
-Hombre, por lo visto, era auryner antes de entrar en Auryn. Desde el principio -le informo.
-Es verdad. Pero, mira, que haga lo que quiera, mientras no le haga daño a nuestros chicos, me da igual. -dice encogiéndose de hombros.- ¿Has ido a My Camp Auryn alguna vez?
-Bueno, sí, hace tiempo.
-¿El primero? -pregunta.
En ese momento suena el timbre que anuncia el comienzo de clase, así que tenemos que dejar de hablar e irnos nuestras respectivas aulas.
Nada más subir las escaleras, entro a mi clase y voy hacia mi sitio, pero ahí está Noemí y un chico besándose. Me quedo congelada, de pie junto a la puerta.
-Tú tranquila, si no miras no te dará asco -me dice un chico.- Hola, soy Luis.
-Ah, hola. Soy Coral. -me presento.
-Eres nueva, ¿no?
-Sí.
Noelia coge a Luis del brazo y se lo llevo con él.
-Eso, emm, vale -se limita a decir mientras se lo lleva.
Noemí y el chico se separan, y el chico se va a su sitio, yo me quedo mirándolo.
-¿A que es muy guapo? -me pregunta, yo asiento porque, efectivamente, es muy guapo- Es mi novio, Pedro. -dice sonriendo- Ni se te ocurra quitármelo, ¿eh? -dice más seria.
-No, no -niego con la cabeza.
Noemí se va fuera de clase, al pasillo, al rato viene Sara, una chica con el pelo entre rubio, pelirrojo y moreno. Se sienta en la silla de Noemí.
-Hola -me saluda.
-Hola -sonrío.
-Como veo que eres nueva, te daré algunos consejos para que sepas dónde te has metido -dice hablando rápido y muy seria.- Hay una chica en D que es una hija de puta como nadie. Te gusta Auryn, ¿no? -pregunta.
-Sí. David, en concreto -respondo.
-La chica esa va por ahí diciendo que se ha liado con el tal David ése. -continúa.
-¿Qué? ¿Cómo se llama? -me pregunta.
-Esme.
Capítulo 103
Capítulo 103
Aunque parezca raro, cuando mi hermano me dice que es la hora de levantarse para empezar el primer día de colegio, no estoy nada nerviosa. De mi armario escojo unos vaqueros, una camiseta de Estados Unidos, y unos zapatos cómodos. No pegan nada con mi mochila, pero no creo que esto importe mucho.
Me dejo el pelo suelto, y como maquillaje, opto por simple corrector y colorete. Ni máscara de pestañas ni eyeliner, no creo que me haga falta.
El colegio empieza normalmente a las ocho y media, pero como hoy es el primer día, empezamos a las once y media.
-Buenos días -saludo a María José y a Carlos en el comedor.- ¿Qué tal habéis dormido? Bueno, dormir poco, ¿no? -bromeo.- Por las ojeras que tienes -le digo a María José.
-Para tu información, estas ojeras son de no haber pegado ojo en toda la noche por los mosquitos que se han colado a invadir mi preciado cuerpo. -comenta.
-Eso es porque tu sangre es muy deliciosa, al igual que tú -dice Carlos para darle un beso.
-Ya estamos y es por la mañana -digo fingiendo una cara de asco.- ¡Yo quiero a mi pastelito! -exclamo.
En ese momento suena el timbre.
-¡Anda! Ahí lo tienes -dice mi hermano apareciendo en la cocina.
-Muy gracioso -digo- ¿Nadie va a abrir la puerta, de verdad? -todos siguen pendientes de su cola cao y sus galletas.- Como siempre, tendré que ir yo. -digo abriendo la puerta a regañadientes.
-3, 2, 1 -dice Carlos.
-¿Coral Herrero? -pregunta un hombre con barba.
-¡Oh! ¡Qué bonito! -exclamo cogiendo el ramo que me ofrece.- Gracias -le digo al hombre que se va hacia el ascensor.
Cierro la puerta, y María José ya está frente a mí inspeccionando el ramo.
-¡Qué bonito! ¿Qué es, de David? -me pregunta.
-No sé -digo dándole vueltas.- Aquí hay una tarjeta. Querida Coral: siento no poder estar ahí, en tu primer día de instituto, pero quiero que sepas que no me he olvidado de ti. Deseo que todo te vaya muy bien, porque te lo mereces. Te ama, tu pastelito. -leo una nota que había.
-¡Qué mono! -exclama María José.
-Vamos a hacerle una foto y a subirla a Instagram -le digo a mi hermano.- Pero hazsela sólo al ramo, ¿eh?
-Vale, vale. Ya está. Toma.
Inmediatamente, la subo a instagram acompañándola de un texto:
''Deseo que te vaya muy bien, porque te lo mereces.' Eres mágico, cielo. Te amo'
Aunque parezca raro, cuando mi hermano me dice que es la hora de levantarse para empezar el primer día de colegio, no estoy nada nerviosa. De mi armario escojo unos vaqueros, una camiseta de Estados Unidos, y unos zapatos cómodos. No pegan nada con mi mochila, pero no creo que esto importe mucho.
Me dejo el pelo suelto, y como maquillaje, opto por simple corrector y colorete. Ni máscara de pestañas ni eyeliner, no creo que me haga falta.
El colegio empieza normalmente a las ocho y media, pero como hoy es el primer día, empezamos a las once y media.
-Buenos días -saludo a María José y a Carlos en el comedor.- ¿Qué tal habéis dormido? Bueno, dormir poco, ¿no? -bromeo.- Por las ojeras que tienes -le digo a María José.
-Para tu información, estas ojeras son de no haber pegado ojo en toda la noche por los mosquitos que se han colado a invadir mi preciado cuerpo. -comenta.
-Eso es porque tu sangre es muy deliciosa, al igual que tú -dice Carlos para darle un beso.
-Ya estamos y es por la mañana -digo fingiendo una cara de asco.- ¡Yo quiero a mi pastelito! -exclamo.
En ese momento suena el timbre.
-¡Anda! Ahí lo tienes -dice mi hermano apareciendo en la cocina.
-Muy gracioso -digo- ¿Nadie va a abrir la puerta, de verdad? -todos siguen pendientes de su cola cao y sus galletas.- Como siempre, tendré que ir yo. -digo abriendo la puerta a regañadientes.
-3, 2, 1 -dice Carlos.
-¿Coral Herrero? -pregunta un hombre con barba.
-¡Oh! ¡Qué bonito! -exclamo cogiendo el ramo que me ofrece.- Gracias -le digo al hombre que se va hacia el ascensor.
Cierro la puerta, y María José ya está frente a mí inspeccionando el ramo.
-¡Qué bonito! ¿Qué es, de David? -me pregunta.
-No sé -digo dándole vueltas.- Aquí hay una tarjeta. Querida Coral: siento no poder estar ahí, en tu primer día de instituto, pero quiero que sepas que no me he olvidado de ti. Deseo que todo te vaya muy bien, porque te lo mereces. Te ama, tu pastelito. -leo una nota que había.
-¡Qué mono! -exclama María José.
-Vamos a hacerle una foto y a subirla a Instagram -le digo a mi hermano.- Pero hazsela sólo al ramo, ¿eh?
-Vale, vale. Ya está. Toma.
Inmediatamente, la subo a instagram acompañándola de un texto:
''Deseo que te vaya muy bien, porque te lo mereces.' Eres mágico, cielo. Te amo'
-Venga, desayuna, que se hace tarde -me dice María José- Yo voy a colocar el ramo en un jarrón, que ya me he terminado el desayuno.
Me preparo un tazón de cereales con leche, y me lo tomo en unos diez minutos, un tiempo récord. Como ya son las once y cuarto, salimos todos de casa a la vez, menos Carlos, que se queda limpiando.
-Adiós. Suerte -nos dice al salir de casa.
A mitad del recorrido, María José se desvía hacia otro lado, y Eloy y yo, seguimos por nuestro camino.
Al llegar al colegio, no sabemos muy bien qué hacer, así que nos quedamos fuera hablando con una chica de mi edad, hasta que nos llaman.
Entramos los tres juntos, y nos separan a las clases por filas. La chica, Belén, se va hacia otra fila distinta, porque va a D. Y Eloy y yo, nos vamos a C.
-¿Esta es la fila de cuarto C? -le pregunto a una chica pelirroja.
-Sí -me sonríe.
Eloy y yo nos ponemos en fila. Él no tarda nada en hacer amigos, mientras que yo, apenas consigo hablar con alguien, por no decir nadie, la verdad.
Nuestra profesora, Lucía, nos lleva hasta nuestra clase, y nos sentamos de forma libre. Decido que es el momento de comenzar a relacionarme con alguien, así que, cuando veo a la chica pelirroja de antes, me acerco a ella y le pregunto:
-Hola. ¿Eres nueva?
-No -sonríe.
Un chico moreno y muy alto le pregunta, de broma:
-Lucía, ¿eres nueva? -y se ríen los dos.
Vale, sí, la pregunta era estúpida, pero la chica podría haberme preguntado si yo lo era. Además, a la chica se le veía una cara de no saber dónde estaba. Y ya, para hablar del chico...
Dicho esto, no tengo más remedio que sentarme atrás del todo, donde la profesora nada más verme, me manda a la primera fila al lado de una chica que se llama Noemí.
-Hola -le saludo antes de sentarme.
-Hola, ¿qué tal? -me pregunta- Eres nueva, ¿no?
-Sí, soy nueva.
-¿Sabes? Me suena mucho tu cara. Como si te hubiera visto en algún sitio antes, pero no recuerdo dónde. -dice mirándome fijamente.
-A lo mejor me has visto en la tele -bromeo.
-Sí, a lo mejor -se ríe, también.
Parecía que era maja, pero con el tiempo descubrí que las ratas pueden tener dos caras.
domingo, 27 de octubre de 2013
Capítulo 102
Si le dáis a la parte en rojo, podréis escuchar la entrevista. Os recuerdo que Auryn no aparece hasta pasada media hora desde el inicio del programa.
Capítulo 102
Hoy es doce de septiembre y estamos en Madrid preparados para la entrevista de No Te Cortes, en los 40 Principales.
Estamos preparados para entrar al estudio, transcurridos veinte minutos desde que empezó el programa, ponen 'I Kissed A Girl', y mientras, Carlos y yo nos marcamos unos bailes. Mi hermano es el encargado de preparar algumos micrófonos y tal, y durante la canción, entra para hacerse una foto con Daniela Blume, la co-presentadora del programa.
Después, a las nueve y media, aproximadamente, Uri y Daniela nos hacen unas señas para entrar.
-Coral -me dice Dani agarrándome el brazo- Después te vienes conmigo al concierto de Selena Gómez, ¿no?
Vaya, se me había olvidado por completo, pero se lo prometí.
-Claro -digo sonriendo.
David es el primero en entrar, seguido de Álvaro, Blas, Carlos, Dani y yo. Todos saludamos a Daniela, que me deja una marca de su pintalabios rojo, inmediatamente me lo quita con su mano.
-Ay, gracias. -le digo sonriendo.
-Nada, perdona, cielo -se disculpa.
Hace lo mismo con Carlos, le da un beso y le mancha la mejilla de pintalabios. Algunas auryners se acercan para saludarnos con besos y abrazos. Ahora llega el momento en el que Daniela tiene que darnos un pico a cada uno. Le da uno a Carlos, pero como las cámaras no lo han grabado, lo tienen que repetir. Me pregunto cómo le sentará eso a María José. Después le da otro a Blas, y otro a mi hermano, al que Carlos responde bromeando con un:
-¡Eh! ¿Pero tú qué haces aquí? ¡Enchufado! -y se ríe.
Cuando giro la cabeza, veo que David se levanta y sonríe. No irá a darle un pico a Daniela también, ¿no? Eso me preocupa, aunque, si lo hace, tapará un poco las sospechas de que estamos juntos, cosa que ya no me importa, pero...
David se vuelve a sentar. Menos mal. Sólo era para subirse los pantalones. Dani se sienta a su lado, ya que hicieron las paces. Aún así, sigo ocultándole a David el beso que me dio Dani aquella noche en el portal de mi casa. Yo me siento entre Dani y Carlos, me pongo los cascos para comprobar que se escuchan, y me los quito para escuchar lo que pasa en el exterior.
Álvaro le da un pico a Daniela, y me animan para que se lo de. Me doy cuenta de que Blas hace una señal de corazón después de que estos dos se den un pico y me río.
-¡Sí, hombre! -exclamo- Que no, que no. -niego con la cabeza.
-Pues nada, si no quiere...
Cuando va a acabar la canción, nos sentamos todos y nos ponemos los auriculares, Daniela se va a su sitio y también se los pone.
Estoy hablando con Dani sobre los temas de la entrevista, cuando Ainhoa, que ha venido para acompañarnos, les pasa los móviles a los demás.
-Coral, el tuyo no lo tengo porque no sé dónde lo has puesto. -me dice.
-Creo que lo tiene mi hermano, pregúntale, anda. -le digo haciendo pucheros.
-Voy.
Mientras, me pasan un folleto del disco de Endless Road 7058 para que lo firme. Cuando lo he firmado, se lo paso a Dani, que deja su bailecito para firmarlo.
-Dáselo ahora a David -el digo cuando, de forma despistada, lo deja a un lado en lugar de dárselo a mi compañero de grupo.
Haciendo publicidad, suena la voz de un chico que se parece muchísimo a la voz y a la forma de hablar de David.
-¿Ese es David? -pregunto.
-¿Qué dices? -pregunta Carlos- ¡Cómo va a ser David!
-Pues la forma de hablar es parecida -me excuso.
-Pues no, no es David -niega Álvaro- Es que está obsesionada.
Vale, ahí la ha cagado.
-No solo con David -me defiende Blas- El otro día me confundió con Carlos, así que... -miente.
Vamos, que Coral quiere pillar cacho de todos, ¿no? -comenta Blume, divertida.
Al rato, viene Ainhoa con mi móvil y me lo da. Rápidamente me meto en el twitter.
-Daniela, dame la contraseña del internet, anda. -digo pasándole el teléfono.
-¿Cómo estáis, chicos? -nos pregutna Uri uan vez comenzada la entrevista.
-Muy bien, gracias -respondemos.
-Bueno, bienvenidos a No Te Cortes -añade.
-Muchas gracias, teníamos ya ganas de venir -explica Carlos- Sobre todo Coral ,que estaba que no vivía.
-Hala, qué mentiroso -digo restándole importancia con la mano.
-Uy, tienes pintalabios -le dice Daniela a Uri
-Claro, si es que...
-Carlos, tú también, y Dani, y Blas. -añade.
-Bueno, durante esta canción, Daniela se ha dedicado a besar en al boca a todos los Auryn, cosa que muchísimas de vosotras querríais hacer, osea que...
También hablamos un poco de nuestro último single, Make My Day, a lo que Álvaro toma la iniciativa y responde:
-Sí, estamos contentísimos. Además, el videoclip... No sé, es que fue una pasada grabarlo, mola, y no sé. También hay una chica muy guapa en el videoclip...
-Que soy yo -interrumpo, riéndome.
-Claro, claro. Sigue soñando, Coral -bromea Carlos dándome unas palmaditas en el hombro.
-¿Sólo una? -pregunta Daniela.- ¿Sólo uan chica guapa? -repite.
Después pregunta cómo vamos de barbas. David lleva un poco; Dani lleva pelusilla; Carlos, nada, como siempre.
-Yo soy el patriarca de la barba -dice Álvaro, a lo que todos repodemos con unas carcajadas.
Una vez dicho esto, y comentado más cosas relacionadas con nuestra carrera, Uri nos informa de una noticia de que una fan de One Direction mató a su perrito porque ninguno de los chicos la siguió en twitter.
-A ver, yo creo que eso no es de ser fan, eso es estar de la olla, porque...
-Yo, por ejemplo -comienzo-, antes de entrar en Auryn yo era auryner, y sí, yo los quería muchísimo, pero no creo que fuera a matar a alguien, ya sea animal o persona, si no conseguía un follow suyo, la verdad. Además, que ya queda claro que es como un poco imposible, ¿no? Por así decirlo, así que yo creo que tendría que estar un poco de la olla, o desesperada, porque...
Capítulo 102
Hoy es doce de septiembre y estamos en Madrid preparados para la entrevista de No Te Cortes, en los 40 Principales.
Estamos preparados para entrar al estudio, transcurridos veinte minutos desde que empezó el programa, ponen 'I Kissed A Girl', y mientras, Carlos y yo nos marcamos unos bailes. Mi hermano es el encargado de preparar algumos micrófonos y tal, y durante la canción, entra para hacerse una foto con Daniela Blume, la co-presentadora del programa.
Después, a las nueve y media, aproximadamente, Uri y Daniela nos hacen unas señas para entrar.
-Coral -me dice Dani agarrándome el brazo- Después te vienes conmigo al concierto de Selena Gómez, ¿no?
Vaya, se me había olvidado por completo, pero se lo prometí.
-Claro -digo sonriendo.
David es el primero en entrar, seguido de Álvaro, Blas, Carlos, Dani y yo. Todos saludamos a Daniela, que me deja una marca de su pintalabios rojo, inmediatamente me lo quita con su mano.
-Ay, gracias. -le digo sonriendo.
-Nada, perdona, cielo -se disculpa.
Hace lo mismo con Carlos, le da un beso y le mancha la mejilla de pintalabios. Algunas auryners se acercan para saludarnos con besos y abrazos. Ahora llega el momento en el que Daniela tiene que darnos un pico a cada uno. Le da uno a Carlos, pero como las cámaras no lo han grabado, lo tienen que repetir. Me pregunto cómo le sentará eso a María José. Después le da otro a Blas, y otro a mi hermano, al que Carlos responde bromeando con un:
-¡Eh! ¿Pero tú qué haces aquí? ¡Enchufado! -y se ríe.
Cuando giro la cabeza, veo que David se levanta y sonríe. No irá a darle un pico a Daniela también, ¿no? Eso me preocupa, aunque, si lo hace, tapará un poco las sospechas de que estamos juntos, cosa que ya no me importa, pero...
David se vuelve a sentar. Menos mal. Sólo era para subirse los pantalones. Dani se sienta a su lado, ya que hicieron las paces. Aún así, sigo ocultándole a David el beso que me dio Dani aquella noche en el portal de mi casa. Yo me siento entre Dani y Carlos, me pongo los cascos para comprobar que se escuchan, y me los quito para escuchar lo que pasa en el exterior.
Álvaro le da un pico a Daniela, y me animan para que se lo de. Me doy cuenta de que Blas hace una señal de corazón después de que estos dos se den un pico y me río.
-¡Sí, hombre! -exclamo- Que no, que no. -niego con la cabeza.
-Pues nada, si no quiere...
Cuando va a acabar la canción, nos sentamos todos y nos ponemos los auriculares, Daniela se va a su sitio y también se los pone.
Estoy hablando con Dani sobre los temas de la entrevista, cuando Ainhoa, que ha venido para acompañarnos, les pasa los móviles a los demás.
-Coral, el tuyo no lo tengo porque no sé dónde lo has puesto. -me dice.
-Creo que lo tiene mi hermano, pregúntale, anda. -le digo haciendo pucheros.
-Voy.
Mientras, me pasan un folleto del disco de Endless Road 7058 para que lo firme. Cuando lo he firmado, se lo paso a Dani, que deja su bailecito para firmarlo.
-Dáselo ahora a David -el digo cuando, de forma despistada, lo deja a un lado en lugar de dárselo a mi compañero de grupo.
Haciendo publicidad, suena la voz de un chico que se parece muchísimo a la voz y a la forma de hablar de David.
-¿Ese es David? -pregunto.
-¿Qué dices? -pregunta Carlos- ¡Cómo va a ser David!
-Pues la forma de hablar es parecida -me excuso.
-Pues no, no es David -niega Álvaro- Es que está obsesionada.
Vale, ahí la ha cagado.
-No solo con David -me defiende Blas- El otro día me confundió con Carlos, así que... -miente.
Vamos, que Coral quiere pillar cacho de todos, ¿no? -comenta Blume, divertida.
Al rato, viene Ainhoa con mi móvil y me lo da. Rápidamente me meto en el twitter.
-Daniela, dame la contraseña del internet, anda. -digo pasándole el teléfono.
-¿Cómo estáis, chicos? -nos pregutna Uri uan vez comenzada la entrevista.
-Muy bien, gracias -respondemos.
-Bueno, bienvenidos a No Te Cortes -añade.
-Muchas gracias, teníamos ya ganas de venir -explica Carlos- Sobre todo Coral ,que estaba que no vivía.
-Hala, qué mentiroso -digo restándole importancia con la mano.
-Uy, tienes pintalabios -le dice Daniela a Uri
-Claro, si es que...
-Carlos, tú también, y Dani, y Blas. -añade.
-Bueno, durante esta canción, Daniela se ha dedicado a besar en al boca a todos los Auryn, cosa que muchísimas de vosotras querríais hacer, osea que...
También hablamos un poco de nuestro último single, Make My Day, a lo que Álvaro toma la iniciativa y responde:
-Sí, estamos contentísimos. Además, el videoclip... No sé, es que fue una pasada grabarlo, mola, y no sé. También hay una chica muy guapa en el videoclip...
-Que soy yo -interrumpo, riéndome.
-Claro, claro. Sigue soñando, Coral -bromea Carlos dándome unas palmaditas en el hombro.
-¿Sólo una? -pregunta Daniela.- ¿Sólo uan chica guapa? -repite.
Después pregunta cómo vamos de barbas. David lleva un poco; Dani lleva pelusilla; Carlos, nada, como siempre.
-Yo soy el patriarca de la barba -dice Álvaro, a lo que todos repodemos con unas carcajadas.
Una vez dicho esto, y comentado más cosas relacionadas con nuestra carrera, Uri nos informa de una noticia de que una fan de One Direction mató a su perrito porque ninguno de los chicos la siguió en twitter.
-A ver, yo creo que eso no es de ser fan, eso es estar de la olla, porque...
-Yo, por ejemplo -comienzo-, antes de entrar en Auryn yo era auryner, y sí, yo los quería muchísimo, pero no creo que fuera a matar a alguien, ya sea animal o persona, si no conseguía un follow suyo, la verdad. Además, que ya queda claro que es como un poco imposible, ¿no? Por así decirlo, así que yo creo que tendría que estar un poco de la olla, o desesperada, porque...
sábado, 26 de octubre de 2013
Capítulo 101
Capítulo 101
-Coral -me dice mi hermano entrando en la habitación- Alguien ha venido a verte.
-¿Alguien? ¿Quién? -pregunto levantándome de la cama y dejando mi portátil a un lado.
-Será mejor que lo veas tú misma, si te lo cuento no te lo vas a creer -dice sonriendo.
Me encojo de hombros y voy hacia la entrada. Me sorprendo mucho al encontrarme con Blas y Lorena en la entrada. También está el pequeñín Aarón, que ya mismo cumplirá un añito.
Lorena está guapísima. Cualquiera diría que hace menos de una semana salió del hospital.
-Hola, Lorena -le saludo dándole dos besos- Hola, Blas. ¿Y este quién es? -le pregunto al bebé.- ¡Qué grande que está! ¿Cuánto tiene ya?
-El veinticuatro de septiembre hace once meses. -contesta Lorena sonriendo- ¿Lo quieres coger?
-¿En serio? Sí, vale -ella me pasa a Aarón y yo lo cojo en brazos siguiendo las ideas que me dio David.- ¿Once ya? -pregunto a lo de la edad- Osea que nació en octubre, ¿no? Qué chiquitito.
-Sí -asiente Lorena- Ya habla un poquito y todo. A veces dice mamá y, otras, dice... papá.
-¿Papá? -pregunto confusa- ¿Y a quién se lo dice?
-Bueno, creo que ha llegado la hora. No se puede ocultar esto mucho más tiempo, ¿no? -dice Blas- Resulta que...
-No,no -le interrumpe Lorena- Yo lo cuento. Resulta que Blas me ayudó con el niño y tal, por lo que Aarón pasó mucho tiempo con. De ahí comenzó a llamarle papá.
-Y, bueno, yo quiero decir una cosa -comienza Blas. Él se pone delante de Lorena y se pone de rodillas- Lorena, yo te conozco desde hace poco, pero los pocos ratos que hemos pasado juntos, han sido los suficientes para saber que eres una mujer valiente, fuerte, agradable... Sé que ha pasado poco tiempo desde que ha pasado, pero, ¿podrías darme una oportunidad como pareja, por favor?
Noto como Lorena se queda de piedra. Por un momento temo que se caiga o se desmaye, pero no lo hace.
-Si todavía no lo has superado, lo entiendo perfectamente, no tienes por qué...
-Me encantaría, Blas -le interrumpe Lorena- Has demostrado ser un chico maduro y responsable. Me alegra que te hayas fijado en mis cualidades, como hacía... -deja la frase a medio acabar- Lo siento, no volveré a comentar nada de él.
-No te preocupes -le dice Blas- Es normal. Tú tranquila, no te preocupes, ¿vale?
-Gracias.
-Bueno -digo rompiendo el hielo- ¿Qué os parece si mi hermano prepara un café, saca unas pastas y merendamos?
-Por mí, perfecto -responde Blas.
-Yo... Siento no haber traído nada, es que no me ha dado tiempo. Lo siento, de verdad.
-Ah, no te preocupes -digo sonriendo- Aquí nos sobra comida. Como está Carlos y mi hermano... Son unos glotones -aseguro.
-Hablando de Carlos, ¿dónde está? Hace tiempo que no lo veo. -pregunta Blas.
-Adivínalo -le digo sonriendo- Con María José, cenando.
-¿Y Ainhoa? -pregunta.
-Con mi hermano -responde Lorena- Están saliendo, creo.
-¿Sí? A mí no me han dicho nada ninguno de los dos. -respondo.
-Cómo se lo tenía callado Ainhoa -responde mi hermano desde la cocina.- Venga, pasad al salón, yo preparo la merienda.
Todos entramos al salón, y yo bajo el aire para que Aarón no se resfríe.
Hablamos sobre la gira, y eso no nos puede evitar conducirnos al tema de los Neox Fan Awards, a los cuales, ya estamos nominados.
-¿Cuándo son? -pregunto.
-A ver, espera que lo mire -dice Blas sacando su móvil.- El veinticuatro de septiembre.
-¡Anda! El mismo día que Aarón cumple once meses. -exclama Lorena.
-¿Sí? Qué bien.
-Si no diera mucho el cante, se lo dedicaba a Aarón -dice Blas.
-Yo creo que sí dará el cante -opino.
-Yo también -coincide Lorena.
Eloy nos trae la merienda, y él se viste y se va a dar una vuelta por Madrid asegurándome que va a comprarse ropa y que vendrá para la hora de cenar. Eso nos deja a Lorena, Blas, Aarón y yo, solos.
Estamos en mitad de una conversación sobre nuestro próximo viaje a Latino América, cuando Aarón, gateando, va hacia Blas.
-Mira, mira -susurra Lorena.
Aarón se da cuenta y se para un momento para mirar a su madre, que le responde con un:
-Mira, ¿quién es?
-Pa-pá -balbucea Aarón extendiendo los brazos, Blas lo coge y lo sienta sobre sus rodillas.
-A ver, y ésta, ¿quién es? -pregunta señalando a Lorena.
-Mama -balbucea, para después sonreír.
-Ay, mi niño, lo que yo lo quiero. -dice haciéndole cosquillas. Aarón se queja, y hace ademán de bajarse al suelo, por lo que Blas se ve obligado a dejarlo. El niño se entretiene gateando por el salón. Se queda frente al estante bajo de la estantería donde tengo algunas películas que he visto recientemente. Coge una: 'Peter Pan'
-Nene, deja eso -le regaña Lorena. Aarón coge el DVD con los dedos índice y pulgar y lo levanta en el aire, casi se cae al suelo.- Aarón, no.
Como un buen niño, deja el DVD encima del resto de películas, haciendo caso a su madre.
Cuando, tras diez minutos, se ha cansado de gatear, se acerca a Blas y levanta los brazos.
-¿Qué quiere? -pregunta Blas, confuso.
-Quiere que lo cojas en brazos -le indica Lorena.
-Coral -me dice mi hermano entrando en la habitación- Alguien ha venido a verte.
-¿Alguien? ¿Quién? -pregunto levantándome de la cama y dejando mi portátil a un lado.
-Será mejor que lo veas tú misma, si te lo cuento no te lo vas a creer -dice sonriendo.
Me encojo de hombros y voy hacia la entrada. Me sorprendo mucho al encontrarme con Blas y Lorena en la entrada. También está el pequeñín Aarón, que ya mismo cumplirá un añito.
Lorena está guapísima. Cualquiera diría que hace menos de una semana salió del hospital.
-Hola, Lorena -le saludo dándole dos besos- Hola, Blas. ¿Y este quién es? -le pregunto al bebé.- ¡Qué grande que está! ¿Cuánto tiene ya?
-El veinticuatro de septiembre hace once meses. -contesta Lorena sonriendo- ¿Lo quieres coger?
-¿En serio? Sí, vale -ella me pasa a Aarón y yo lo cojo en brazos siguiendo las ideas que me dio David.- ¿Once ya? -pregunto a lo de la edad- Osea que nació en octubre, ¿no? Qué chiquitito.
-Sí -asiente Lorena- Ya habla un poquito y todo. A veces dice mamá y, otras, dice... papá.
-¿Papá? -pregunto confusa- ¿Y a quién se lo dice?
-Bueno, creo que ha llegado la hora. No se puede ocultar esto mucho más tiempo, ¿no? -dice Blas- Resulta que...
-No,no -le interrumpe Lorena- Yo lo cuento. Resulta que Blas me ayudó con el niño y tal, por lo que Aarón pasó mucho tiempo con. De ahí comenzó a llamarle papá.
-Y, bueno, yo quiero decir una cosa -comienza Blas. Él se pone delante de Lorena y se pone de rodillas- Lorena, yo te conozco desde hace poco, pero los pocos ratos que hemos pasado juntos, han sido los suficientes para saber que eres una mujer valiente, fuerte, agradable... Sé que ha pasado poco tiempo desde que ha pasado, pero, ¿podrías darme una oportunidad como pareja, por favor?
Noto como Lorena se queda de piedra. Por un momento temo que se caiga o se desmaye, pero no lo hace.
-Si todavía no lo has superado, lo entiendo perfectamente, no tienes por qué...
-Me encantaría, Blas -le interrumpe Lorena- Has demostrado ser un chico maduro y responsable. Me alegra que te hayas fijado en mis cualidades, como hacía... -deja la frase a medio acabar- Lo siento, no volveré a comentar nada de él.
-No te preocupes -le dice Blas- Es normal. Tú tranquila, no te preocupes, ¿vale?
-Gracias.
-Bueno -digo rompiendo el hielo- ¿Qué os parece si mi hermano prepara un café, saca unas pastas y merendamos?
-Por mí, perfecto -responde Blas.
-Yo... Siento no haber traído nada, es que no me ha dado tiempo. Lo siento, de verdad.
-Ah, no te preocupes -digo sonriendo- Aquí nos sobra comida. Como está Carlos y mi hermano... Son unos glotones -aseguro.
-Hablando de Carlos, ¿dónde está? Hace tiempo que no lo veo. -pregunta Blas.
-Adivínalo -le digo sonriendo- Con María José, cenando.
-¿Y Ainhoa? -pregunta.
-Con mi hermano -responde Lorena- Están saliendo, creo.
-¿Sí? A mí no me han dicho nada ninguno de los dos. -respondo.
-Cómo se lo tenía callado Ainhoa -responde mi hermano desde la cocina.- Venga, pasad al salón, yo preparo la merienda.
Todos entramos al salón, y yo bajo el aire para que Aarón no se resfríe.
Hablamos sobre la gira, y eso no nos puede evitar conducirnos al tema de los Neox Fan Awards, a los cuales, ya estamos nominados.
-¿Cuándo son? -pregunto.
-A ver, espera que lo mire -dice Blas sacando su móvil.- El veinticuatro de septiembre.
-¡Anda! El mismo día que Aarón cumple once meses. -exclama Lorena.
-¿Sí? Qué bien.
-Si no diera mucho el cante, se lo dedicaba a Aarón -dice Blas.
-Yo creo que sí dará el cante -opino.
-Yo también -coincide Lorena.
Eloy nos trae la merienda, y él se viste y se va a dar una vuelta por Madrid asegurándome que va a comprarse ropa y que vendrá para la hora de cenar. Eso nos deja a Lorena, Blas, Aarón y yo, solos.
Estamos en mitad de una conversación sobre nuestro próximo viaje a Latino América, cuando Aarón, gateando, va hacia Blas.
-Mira, mira -susurra Lorena.
Aarón se da cuenta y se para un momento para mirar a su madre, que le responde con un:
-Mira, ¿quién es?
-Pa-pá -balbucea Aarón extendiendo los brazos, Blas lo coge y lo sienta sobre sus rodillas.
-A ver, y ésta, ¿quién es? -pregunta señalando a Lorena.
-Mama -balbucea, para después sonreír.
-Ay, mi niño, lo que yo lo quiero. -dice haciéndole cosquillas. Aarón se queja, y hace ademán de bajarse al suelo, por lo que Blas se ve obligado a dejarlo. El niño se entretiene gateando por el salón. Se queda frente al estante bajo de la estantería donde tengo algunas películas que he visto recientemente. Coge una: 'Peter Pan'
-Nene, deja eso -le regaña Lorena. Aarón coge el DVD con los dedos índice y pulgar y lo levanta en el aire, casi se cae al suelo.- Aarón, no.
Como un buen niño, deja el DVD encima del resto de películas, haciendo caso a su madre.
Cuando, tras diez minutos, se ha cansado de gatear, se acerca a Blas y levanta los brazos.
-¿Qué quiere? -pregunta Blas, confuso.
-Quiere que lo cojas en brazos -le indica Lorena.
Capítulo 100
Y llegó el esperado capítulo 100 (no sé si a vosotras os hará tanta ilusión como a mí). Bueno, deciros que este capítulo está especialmente dedicado a todas vosotras, princesitas, que sois la que le dais sentido a esta novela. Sin vosotras, fijo que me hubiera rendido y hubiera dejado de publicar capítulos. Cada comentario vuestro que recibo, me saca una sonrisa, y no dejo de hablar de vosotras y de lo majas que sois. Ahora entiendo lo que siente Auryn, nuestro grupo favorito, cuando ve que estamos siempre ahí. Muchísimas gracias, de corazón. Sois lo mejor que me ha pasado en la vida.
Por cierto, eh decidido que ya se acabe MCA, pero aun así, seguiré contando cosas que sucedieron.
-Bueno, Carlos. ¿Cuándo te vas de viaje con María José? -pregunto.
-Pues hemos pensado en irnos, durante nuestras vacaciones, una semanita a Valencia, para que conozca a mi madre, y la siguiente semana a Hawai. -cuenta.
-¿Hawai? ¡Qué suerte! -exclamo- Pero, sabes que estará en el colegio, ¿no?
-Vaya, se me había olvidado. -dice entristeciéndose- ¿Y si cambio la fecha del viaje?
Miro a María José, sé las ganas que tiene irse de viaje con Carlos. Cuando celebramos su cumple en My Camp Auryn, le cantamos cumpleaños feliz, y le dimos su regalo, estuvo toda la noche diciéndome lo feliz que estaba, lo mucho que quería a Carlos, y lo que deseaba que llegara mediados de octubre para poder disfrutar de sus vacaciones a solas con él. Daría lo que fuera por no tener que esperar más tiempo.
-Dejalo como está. Seguro que prefiere aplicarse más para estudiar, que tener que esperar más tiempo a pasar unas vacaciones contigo.
-¿Seguro? -me pregunta, yo asiento- Y sus padres, ¿qué dirán?
-Ellos te aprecian muchísimo. Ella me lo ha dicho. Te quieren como si fueras un hijo suyo. -le aseguro- Son de los padres que piensan que no hay edad para el amor. Se llevan diez años de diferencia.
-Madre mía, todo sale sobre ruedas. Qué buena vida llevo.
-Ya ves.
Bostezo sonoramente.
-Dios, Coral, bosteza cuando puedas. Tú no te cortes, ¿eh? -dice Dani permitiéndose un momento para echar un vistazo atrás, donde yo estoy.
-Es que tengo mucho sueño -digo frotándome uno de los ojos.
-En el maletero hay una almohada. Echa el asiento tuyo hacia delante y sacala -le dice a Carlos.
El le da a una especie de palanquita que hay en el lateral de su asiento, el respaldo se echa hacia delante y Carlos saca un almohada blanca, al momento me la pasa. Yo me inclino un poco hacia la derecha, apoyo la almohada en el reposa cabezas del asiento y, a las dos minutos aproximadamente, me quedo dormida.
Por cierto, eh decidido que ya se acabe MCA, pero aun así, seguiré contando cosas que sucedieron.
Capítulo 100
Parece mentira que ya hayan pasado los tres días del esperado My Camp Auryn. Hemos salido del concierto de Barcelona, y estamos en el auryncar.
David, Álvaro, Blas y María José, dormidos; Carlos y yo, despiertos. Dani va conduciendo.-Bueno, Carlos. ¿Cuándo te vas de viaje con María José? -pregunto.
-Pues hemos pensado en irnos, durante nuestras vacaciones, una semanita a Valencia, para que conozca a mi madre, y la siguiente semana a Hawai. -cuenta.
-¿Hawai? ¡Qué suerte! -exclamo- Pero, sabes que estará en el colegio, ¿no?
-Vaya, se me había olvidado. -dice entristeciéndose- ¿Y si cambio la fecha del viaje?
Miro a María José, sé las ganas que tiene irse de viaje con Carlos. Cuando celebramos su cumple en My Camp Auryn, le cantamos cumpleaños feliz, y le dimos su regalo, estuvo toda la noche diciéndome lo feliz que estaba, lo mucho que quería a Carlos, y lo que deseaba que llegara mediados de octubre para poder disfrutar de sus vacaciones a solas con él. Daría lo que fuera por no tener que esperar más tiempo.
-Dejalo como está. Seguro que prefiere aplicarse más para estudiar, que tener que esperar más tiempo a pasar unas vacaciones contigo.
-¿Seguro? -me pregunta, yo asiento- Y sus padres, ¿qué dirán?
-Ellos te aprecian muchísimo. Ella me lo ha dicho. Te quieren como si fueras un hijo suyo. -le aseguro- Son de los padres que piensan que no hay edad para el amor. Se llevan diez años de diferencia.
-Madre mía, todo sale sobre ruedas. Qué buena vida llevo.
-Ya ves.
Bostezo sonoramente.
-Dios, Coral, bosteza cuando puedas. Tú no te cortes, ¿eh? -dice Dani permitiéndose un momento para echar un vistazo atrás, donde yo estoy.
-Es que tengo mucho sueño -digo frotándome uno de los ojos.
-En el maletero hay una almohada. Echa el asiento tuyo hacia delante y sacala -le dice a Carlos.
El le da a una especie de palanquita que hay en el lateral de su asiento, el respaldo se echa hacia delante y Carlos saca un almohada blanca, al momento me la pasa. Yo me inclino un poco hacia la derecha, apoyo la almohada en el reposa cabezas del asiento y, a las dos minutos aproximadamente, me quedo dormida.
miércoles, 23 de octubre de 2013
Capítulo 99
Capítulo 99
La corriente de aire que entra por la ventana hace que me despierte de madrugada. Llevo unos quince minutos en mi cama, boca arriba, sin poder conciliar el sueño, cuando decido salir a tomar un poco el aire, será lo mejor.
Salgo del bungalow, sin apenas hacer ruido. Puedo apreciar que son las seis de la mañana, más o menos, debido a que ya mismo estará amaneciendo. Apoyado en una de las barandillas, en pijama, me encuentro a Blas.
-Hola, Blas -saludo. Él no se sobresalta, y tampoco se gira para mirarme, aunque sí me saluda- ¿Qué pasa? ¿No puedes dormir?
-Bueno, más o menos. ¿Y tú?
-Si te soy sincera, estoy nerviosa por lo de mañana.
-¿Lo de mañana? -pregunta, confuso- Si no pasa nada del otro mundo. -se queda un rato pensativo- Ah, porque es el cumple de María José, ¿no?
-Sí, quince añitos, madre mía. -digo mirando los demás bungalows- Además de eso porque tengo curiosidad por saber lo que pasará mañana en My Camp.
-¿Te lo estás pasando bien? -me pregunta.
-Sí. ¿Sabes? Mi tío me ofreció venir a My Camp Auryn el año pasado, pero le dije que no.
-¿Y eso?
-Porque no quería dejarlo solo, me daba pena. -digo avergonzada- Puede parecer una tontería, pero es la verdad.
-Ya, te entiendo. No te atrevías a venir y dejarlo solo tres días, ¿verdad? -comprende.
-Sí. ¿Y tú? ¿Por qué no puedes dormir? -le pregunto.
-Cosas...
-¿Como qué? -me inclino hacia delante para mirarle a sus ojos azulitos, le brillan. Reconozco esa expresión, está enamorado. Qué mono, nuestro chiqui se ha enamorado, pero, ¿de quién?
-Por ejemplo, estoy muy preocupado por Lorena. -comienza.
Ah, ¿sí? Vaya, eso es algo nuevo para mí. Lorena tiene veintidós años, sí, es joven. Y es guapísima: morena, ojos y pelo castaño oscuro... Y también tiene un hijo. ¿Cómo le sentará eso a Blas? ¿Se habrá parado a pensar que, si escoge a Lorena, escogerá cuidar de un hijo que no es de su sangre?
-Me preocupo mucho por ella -continúa- ¿Sabes cuántos años tiene?
-Veintidós. -le respondo- Es joven, puede encontrar a alguien. Aunque cuando se enteren de que tiene un hijo... La gente no suele querer a alguien con paquete. Prefieren vivir la vida y, si escogen un niño, esperan que sea suyo.
-¿Por eso está tu tío solo? -me pregunta, directo.
-Sí. Desgraciadamente, sí. -digo agachando la cabeza.
-Yo nunca haría eso, la verdad. Si me enamoro, pues me enamoro, y se acabó. -ambos guardamos silencio durante unos instantes- ¿Crees que me puedo enamorar de alguien a la que sólo he visto dos veces, que esas dos veces han sido en el hospital, y que tenga un hijo?
-El amor no entiende de edades, de razas, ni de religiones -digo. Es la respuesta más sabia que sé- El amor no entiende de anda, es ciego. Y si no, míranos a David y a mí. Con diez años de diferencia.
-¿Me guardas un secreto? -pregunta, yo asiento- Creo que me gusta... Lorena.
-¿De verdad? -pregunto, atónita.
-Sí. Llámame loco, pero cuando acabe My Camp Auryn, le pediré que quedemos a tomar algo. -medita sus palabras antes de añadir:- ¿Crees que será demasiado pronto? Es decir, se acaba de enterar que su marido ha fallecido, a lo mejor no lo ha asumido.
-Si algo caracteriza a Lorena es que es muy fuerte, valiente y que sabe aceptar las cosas rápidamente. Su lema es: Cuanto antes, mejor. Así que no debes preocuparte por eso. Fijo que ya ha pasado página.
-Pareces una psicóloga. Tus consejos siempre funcionan, nunca fallas, tía.
-Hasta que falle. Nadie es perfecto, recuerdalo. Soy más Anti-heroína que heroína.
-Yo creo que no -dice pasándome un brazo por los hombros- Es que te quiero más -dice dándome un beso en la frente.
-Yo también te quiero, mucho. Gracias a ti, conseguí a mi pastelito.
-Eso es verdad. Debes quererme a mí más que a nadie, ¿eh?
-Sí, sí.
-¿Has visto alguna vez el amanecer? -me pregunta.
-La verdad es que no -admito- ¿Podemos ir a verlo?
-Si quieres... -dice bajando por la escalera.
Lo que ninguno de los dos sabíamos es que, en ese momento, alguien nos estaba grabando.
Capítulo 98
Capítulo 98
-¡Coral! Venga, que eres la última para el Just Dance. -me avisa Carlos.
-¡Voy! -digo subiéndome los pantalones.
No penséis mal, por favor. Resulta que ahora tenemos que bailar con el Just Dance, y yo me había vestido con una camiseta de tirantas. Justo cuando iba a salir del bungalow, me di cuenta de que estaba lloviendo, por lo que he tenido que cambiarme de ropa. Solo me he podido cambiar de camiseta, ya que todos los pantalones que me había traído eran shorts. Al final, me pongo unas converse rosas, una camiseta negra y unos shorts vaqueros.
Salimos al escenario, donde ya hay varios auryners calentando para bailar.
Yo me estiro un poco, por eso de las agujetas, y enseguida me subo al escenario con mis compañeros preparada para bailar.
Como primera canción, ponen 'I Kissed A Girl', de Katy Perry. Fijo que la han escogido por Carlos, aunque este no parece muy emocionado porque apenas baila en todo el rato.
He de reconocer que, al principio, yo no bailé casi nada, por no decir nada. Pero es debido a que me cuesta coger confianza y no pillo muy bien los pasos.
Durante ese tiempo me dedico a observar a los demás: Blas no da un palo al agua, es decir, deambula por el escenario; Álvaro hace un paso de cada cinco; Carlos baila sin ganas, o sin emoción (quizá es que no baila porque no sabe y no quiere ponerse en evidencia); y David baila más o menos bien. Eso sí, el que baila mejor es Dani, que parece que lo lleva haciendo desde toda la vida.
A los seis nos acompañan dos chicas de veinte años. Desde el escenario puedo observar cómo María José anima a las chicas que están abajo, y cómo las alaga por sus buenos movimientos. A algunas les va poniendo una pegatina para saber si pasan a la siguiente fase o no.
La siguiente fase consiste en bailar otra pieza más difícil, 'Troublemaker' de Olly Murs. Al principio, empezamos muy motivados todos, pero poco a poco, volvemos a estar como antes. Al contrario que Blas o Carlos, yo estoy bastante motivada, lo que hace que nuestros compañeros se dediquen a mirarnos al no tener otra cosa que hacer. María José continúa poniendo pegatinas a las que mejor bailan.
Cuando ya hemos terminado, hay unas veintiún chicas y tres chicos finalistas. Elegimos los equipos y a mí me toca con dos chicos, (Andrés y Jesús), y dos chicas, (Nerea y Natalia). Andrés es alto, con ojos verdes y morenito, y Jesús es de mi altura, más o menos, con los ojos y el pelo castaño. Nerea es morena con el pelo lisito, y ojos azules; y Natalia es rubia con ojos verdes. Inmediatamente me hago una foto con ellos para subirla más tarde a instagram.
martes, 22 de octubre de 2013
Capítulo 97
Capítulo 97
Después de almorzar, nos vamos a nuestro bungalow. Mientras, los campistas se van a hacer la parte de 'Literatura en el buzón', que consiste en escribirnos algo a cada uno.
Nos preparamos para la entrevista que nos van a hacer distintos tipos de revistas: TopMUsic, Bravo, y Como Tú. También vendrán algunos canales de televisión como Televisión Española, Telecinco y Antena 3.
Primero llega la directora de la revista Bravo, que nos pregunta distintas cosas sobre My Camp Auryn, y después deja paso a la parte divertida de la entrevista.
Saca unos pintalabios rosas y les pinta a cada uno de los chicos unos besos en el cuello, y a otros, en la mejilla. Después, me lo da a mí y me pinto los labios. Nos hacen unas fotos y después, comienza a hacernos la entrevista, empezando por David:
-Yo creo que la mejor manera de que un beso le guste a alguien es darlo con sentimiento -dice sonriendo. Yo no puedo evitar sonrojarme- A mí me gusta dar los besos lentos y suaves, para... para notar los dos labios -dice sonrojándose, los demás nos reímos- Para mí que, con un beso, se puede conocer perfectamente a la otra persona. -añade.
-Y, ¿tú eres de esos que besuquean... al 'estilo pulpo'? -pregunta la directora.
-¿Al estilo pulpo? -pregunto yo- ¿Eso qué es?
-Pues que te hagan así -dice Blas imitando un morreo de los grandes. Los demás estallamos en carcajadas- ¿Sabes? Que te succionen los labios.
-Vale, vale, ya lo he entendido -digo entre risas.
-No, no, yo no soy de esos -dice negando con la cabeza y sonriendo.
Yo ya lo sabía, pero no quería decir nada. Creo que soy de las que mejor conoce a David respecto al tema de besos.
-¿Y tú, Blas? -pregunta la directora, Cristina.
-Yo... -comienza.
-¿Besas bien? -le pregunta Cristina.
-¡El qué va a besar bien! -exclama Dani.
-Perdona, Dani, pero en más de una ocasión, me han dicho que beso muy bien -dice ofendido.- La verdad es que no doy dos besos iguales porque todo depende del momento y de la persona.
-Y, ¿cómo te gustan? -pregunta la directora.- Con lengua, sin ella...
-Ah, ¡pues de todos maneras! Con lengua, sin lengua, cortos, largos, intensos, menos intensos...
-Vaya, vaya. Ya sabemos que eres todo un 'Heartbreaker', ¿eh?
-Bueno, sí. ¡Conmigo nunca se sabe! -suelta.
-A ver, Coral, te toca. -dice.
-¿Yo? -pregunto. No me lo esperaba y, la verdad es que no tenía nada pensado.
-¿Cómo te gustan? -pregunta.
-Pues... no sé... -decido imaginarme los besos con David y más o menos, consigo explicar cómo me gustan- A ver, a mí me gustan primero lentitos y después más fuertes y eso.
-¿Cuál es tu sitio preferido para que te besen?
-En el cuello me encanta. Me parece muy... bonito -digo sonrojándome.- También me gustan que me muerdan el labio, pero odio los típicos estos que te babosean y te dejan la boca babeada. -digo haciendo una mueca.
-Vale. A ver... Álvaro. -dice Cristina- Además de tu mirada, que hechiza, ¿Cómo lo hacen tus labios?
-Pues mucho más -se limita a responder- Cuando me beso por primera vez, sólo por primera, titubeo hasta que llego a su boca.
-Ah, míralo -dice la directora con una sonrisa.- Para darle más emoción, ¿no?
-Claro. Además me encantan los besos de película, cuando sus labios rozan los míos me empleo a fondo para que se sienta súper especial.
-¿Cómo sería tu beso perfecto, Álvaro?
-Pues... bajo la lluvia.
-¡Madre mía! ¡Otro rompecorazones! -exclama Cristina.- Te toca, Dani. Cuéntanos.
-A ver, yo, cuando beso a una chica, me encanta que me muerda el labio, y si ella me lo muerde a mí... Pff, ¡me pone a mil! -confiesa.
-¡Anda! ¿Y eso? -pregunta la directora.
-Es que besar todo el rato con lengua me aburre.
-¿Y tu parte favorita para besar a una chica, o tu beso ideal?
-Pues... mi beso ideal, que ella me muerda el labio, y mi parte favorita es en la oreja. Eso sí, ¡para que luego me lo devuelva, claro!
-Vamos, que eres un apasionado -resume Cristina.
-Yo, ¡claro!
-A ver, Carlos, cuéntanos. ¿Te gusta dirigir, o que te dirijan?
-A mí me gusta llevar las riendas a la hora de besar. Odio que me besen la oreja, o que me hablen al oído.
-¿Por qué? -pregunto por curiosidad.- Con lo bonito que es que te susurren al oído...
-¡Porque me hace cosquillas y me molesta! -exclama con una sonrisa- A mí los besos sencillitos.
-Osea que tampoco eres de esos que son muy pegajosos, ¿no?
-¡Qué va! No soy de los que te babean la cara, ese no es mi estilo de besar. -confiesa.
Alguien pega en la puerta, abre y vemos a María José:
-Hola, perdonad que moleste, pero ha llegado la directora de la revista TopMusic para haceros la entrevista.
-Bueno... ¿nosotros hemos acabado? -le pregunta Blas a Cristina.
-Sí, ya no me hace falta nada más, gracias -dice levantándose y recogiendo sus cosas.- En fin, adiós.
Nos despedimos de ella y le damos dos besos cada uno.
-Gracias por la entrevista -añade.
-A ti, muchas gracias. -decimos todos- Adiós.
Después de almorzar, nos vamos a nuestro bungalow. Mientras, los campistas se van a hacer la parte de 'Literatura en el buzón', que consiste en escribirnos algo a cada uno.
Nos preparamos para la entrevista que nos van a hacer distintos tipos de revistas: TopMUsic, Bravo, y Como Tú. También vendrán algunos canales de televisión como Televisión Española, Telecinco y Antena 3.
Primero llega la directora de la revista Bravo, que nos pregunta distintas cosas sobre My Camp Auryn, y después deja paso a la parte divertida de la entrevista.
Saca unos pintalabios rosas y les pinta a cada uno de los chicos unos besos en el cuello, y a otros, en la mejilla. Después, me lo da a mí y me pinto los labios. Nos hacen unas fotos y después, comienza a hacernos la entrevista, empezando por David:
-Yo creo que la mejor manera de que un beso le guste a alguien es darlo con sentimiento -dice sonriendo. Yo no puedo evitar sonrojarme- A mí me gusta dar los besos lentos y suaves, para... para notar los dos labios -dice sonrojándose, los demás nos reímos- Para mí que, con un beso, se puede conocer perfectamente a la otra persona. -añade.
-Y, ¿tú eres de esos que besuquean... al 'estilo pulpo'? -pregunta la directora.
-¿Al estilo pulpo? -pregunto yo- ¿Eso qué es?
-Pues que te hagan así -dice Blas imitando un morreo de los grandes. Los demás estallamos en carcajadas- ¿Sabes? Que te succionen los labios.
-Vale, vale, ya lo he entendido -digo entre risas.
-No, no, yo no soy de esos -dice negando con la cabeza y sonriendo.
Yo ya lo sabía, pero no quería decir nada. Creo que soy de las que mejor conoce a David respecto al tema de besos.
-¿Y tú, Blas? -pregunta la directora, Cristina.
-Yo... -comienza.
-¿Besas bien? -le pregunta Cristina.
-¡El qué va a besar bien! -exclama Dani.
-Perdona, Dani, pero en más de una ocasión, me han dicho que beso muy bien -dice ofendido.- La verdad es que no doy dos besos iguales porque todo depende del momento y de la persona.
-Y, ¿cómo te gustan? -pregunta la directora.- Con lengua, sin ella...
-Ah, ¡pues de todos maneras! Con lengua, sin lengua, cortos, largos, intensos, menos intensos...
-Vaya, vaya. Ya sabemos que eres todo un 'Heartbreaker', ¿eh?
-Bueno, sí. ¡Conmigo nunca se sabe! -suelta.
-A ver, Coral, te toca. -dice.
-¿Yo? -pregunto. No me lo esperaba y, la verdad es que no tenía nada pensado.
-¿Cómo te gustan? -pregunta.
-Pues... no sé... -decido imaginarme los besos con David y más o menos, consigo explicar cómo me gustan- A ver, a mí me gustan primero lentitos y después más fuertes y eso.
-¿Cuál es tu sitio preferido para que te besen?
-En el cuello me encanta. Me parece muy... bonito -digo sonrojándome.- También me gustan que me muerdan el labio, pero odio los típicos estos que te babosean y te dejan la boca babeada. -digo haciendo una mueca.
-Vale. A ver... Álvaro. -dice Cristina- Además de tu mirada, que hechiza, ¿Cómo lo hacen tus labios?
-Pues mucho más -se limita a responder- Cuando me beso por primera vez, sólo por primera, titubeo hasta que llego a su boca.
-Ah, míralo -dice la directora con una sonrisa.- Para darle más emoción, ¿no?
-Claro. Además me encantan los besos de película, cuando sus labios rozan los míos me empleo a fondo para que se sienta súper especial.
-¿Cómo sería tu beso perfecto, Álvaro?
-Pues... bajo la lluvia.
-¡Madre mía! ¡Otro rompecorazones! -exclama Cristina.- Te toca, Dani. Cuéntanos.
-A ver, yo, cuando beso a una chica, me encanta que me muerda el labio, y si ella me lo muerde a mí... Pff, ¡me pone a mil! -confiesa.
-¡Anda! ¿Y eso? -pregunta la directora.
-Es que besar todo el rato con lengua me aburre.
-¿Y tu parte favorita para besar a una chica, o tu beso ideal?
-Pues... mi beso ideal, que ella me muerda el labio, y mi parte favorita es en la oreja. Eso sí, ¡para que luego me lo devuelva, claro!
-Vamos, que eres un apasionado -resume Cristina.
-Yo, ¡claro!
-A ver, Carlos, cuéntanos. ¿Te gusta dirigir, o que te dirijan?
-A mí me gusta llevar las riendas a la hora de besar. Odio que me besen la oreja, o que me hablen al oído.
-¿Por qué? -pregunto por curiosidad.- Con lo bonito que es que te susurren al oído...
-¡Porque me hace cosquillas y me molesta! -exclama con una sonrisa- A mí los besos sencillitos.
-Osea que tampoco eres de esos que son muy pegajosos, ¿no?
-¡Qué va! No soy de los que te babean la cara, ese no es mi estilo de besar. -confiesa.
Alguien pega en la puerta, abre y vemos a María José:
-Hola, perdonad que moleste, pero ha llegado la directora de la revista TopMusic para haceros la entrevista.
-Bueno... ¿nosotros hemos acabado? -le pregunta Blas a Cristina.
-Sí, ya no me hace falta nada más, gracias -dice levantándose y recogiendo sus cosas.- En fin, adiós.
Nos despedimos de ella y le damos dos besos cada uno.
-Gracias por la entrevista -añade.
-A ti, muchas gracias. -decimos todos- Adiós.
lunes, 21 de octubre de 2013
Capítulo 96
Capítulo 96
-¡Blas! -grito- ¡Blas!
-Ey, hola -dice dándome dos besos- ¿Qué tal?
-Bien, aquí.
-Perdona, es que iba hablando con Lorena.
-¿Con la madre de Aarón? -pregunto.- ¿Cómo está?
-Bien. Ya ha aceptado lo de su marido. Pobre mujer. Están Lucas, Ainhoa y Aarón con ella. Dicen que mañana le darán el alta.
-¿Mañana? -pregunto. Es muy raro para alguien que ha estado en coma durante tanto tiempo.
-Sí. Necesitan la cama. Otro accidente. -me informa.
-Vaya, parece que sale uno y entra otro.
-Sí... -dice mirando al suelo.
-Voy a por las camisetas para los petardos estos... -Blas no deja que termine.
-¿Qué petardos?
-Dani, Álvaro y mi hermano. Son esas, ¿no? -pregunto señalando su camiseta.
-Sí. Vamos -dice echándose a andar- ¿Sabes sus tallas?
-Sí. La de Álvaro y la de mi hermano, la M; y la de Dani, la S -bromeo.
-¡Qué cabrona! -exclama.
-Tú calla, que Dani se enfada conmigo -le digo riendo.
-Qué mala gente. ¿Sabes qué broma le vas a gastar a quién?
-¿Cómo? -pregunto.
-Cada año gastamos una broma a alguien del grupo, y este año te toca a ti gastársela a alguien. ¿A quién quieres?
-No sé, ¿a quién se la habéis gastado ya?
-A David y a Carlos, que siempre nos gastaba bromas a nosotros y decidimos vengarnos.
-Pues escojo a Dani -le digo- Así me vengaré de él -digo riéndome como una malvada.
-Le has cogido manía, sí señor. Espero que nunca te enfades conmigo, si no, estoy perdido. -ambos nos reímos.
-Allí es -dice señalando una mesa en la que están las camisetas y el merchandising.
Ambos nos acercamos. No hay mucha gente, unos dos o tres, por suerte, llevamos gafas de sol y una gorra, por lo que esperamos no ser reconocidos.
-Hola -saludo.- Tres camisetas de la talla M, por favor. -pido, intentando disimular la voz.
-Enseguida -me dice uno de los encargados.
Veo un colgante que me enamora. Se puede leer: 'My Camp Auryn 29/30/31 agosto 2013', decido pedirlo, también. Ya de paso, aprovecho para comprarme el CD de nuestro último single 'Make My Day'.
-Pues serían... veintitrés euros, por favor. -me dice el chico.
-Esto... yo... -me levanto un poco las gafas de sol.
-Como tiene la suscripción VIP, no necesitará pagar nada. -añade, disimulando- Aquí tiene. -dice pasándome una bolsa.- Adiós y gracias.
-A ti -añado una sonrisa.- Adiós.
Me doy la vuelta y Blas y yo, volvemos a nuestro bungalow.
-No sé cómo te las arreglas para no ser reconocida. Hasta has disimulado la voz -me dice.- ¿Cómo lo haces? Yo voy a la bolera y me acosan.
-Pero si en el fondo te gusta -le digo.
-Claro que me gusta -reconoce- Eso es que te admiran y te quieren. Lo que no me gusta es que gente que no sepa quién eres ni a qué te dedicas, es decir, que sólo hayan escuchado tu nombre, te pida una foto o un autógrafo. Eso lo odio.
-Ya, y yo también. Lo hacen para fardar. Dani fue al concierto de Barcelona o de Madrid del grupo One Direction, ¿no? -pregunto.
-Creo que sí, ¿por?
-Una amiga de una chica de Málaga que conozco, fue al concierto y se encontró a Dani. Le pidió una foto y Dani le dijo que sí. Después, la chica se puso a fardar de que tenía una foto con Dani de Auryn, aunque en realidad le importaba una mierda Dani. Sólo quería la foto para fardar de que se había hecho una foto con alguien famoso.
-Pues lo veo una estupidez. Lo que ha hecho esa chica, me refiero. Si no le gusta nuestro grupo... Es una tontería.
-Y ya no es que no le guste, es que dice que somos una copia barata de One Direction. -estas palabras duelen. Si me dolía antes cuando los amaba con locura, más me duelen ahora, porque me llaman copia barata de un grupo que no tiene nada que ver con nosotros. Sí, nuestro estilo de música es el mismo, pero ahí se queda. ¿O acaso One Direction cantan en español?- ¿Lo sabías? -pregunto.
-¿El qué?
-Lo de que nos llaman copias baratas.
-Sí -dice- Pero me da igual, sé que no lo somos, así que...
Llegamos al bungalow, me meto en el baño, me cambio de camiseta y me pongo la de My Camp Auryn, también me pongo el colgante. Salgo y saco el CD de la bolsa, lo meto en la maleta. También hay algo dentro de la bolsa, un papel con las actividades propuestas para My Camp Auryn.
-¡Blas! -grito- ¡Blas!
-Ey, hola -dice dándome dos besos- ¿Qué tal?
-Bien, aquí.
-Perdona, es que iba hablando con Lorena.
-¿Con la madre de Aarón? -pregunto.- ¿Cómo está?
-Bien. Ya ha aceptado lo de su marido. Pobre mujer. Están Lucas, Ainhoa y Aarón con ella. Dicen que mañana le darán el alta.
-¿Mañana? -pregunto. Es muy raro para alguien que ha estado en coma durante tanto tiempo.
-Sí. Necesitan la cama. Otro accidente. -me informa.
-Vaya, parece que sale uno y entra otro.
-Sí... -dice mirando al suelo.
-Voy a por las camisetas para los petardos estos... -Blas no deja que termine.
-¿Qué petardos?
-Dani, Álvaro y mi hermano. Son esas, ¿no? -pregunto señalando su camiseta.
-Sí. Vamos -dice echándose a andar- ¿Sabes sus tallas?
-Sí. La de Álvaro y la de mi hermano, la M; y la de Dani, la S -bromeo.
-¡Qué cabrona! -exclama.
-Tú calla, que Dani se enfada conmigo -le digo riendo.
-Qué mala gente. ¿Sabes qué broma le vas a gastar a quién?
-¿Cómo? -pregunto.
-Cada año gastamos una broma a alguien del grupo, y este año te toca a ti gastársela a alguien. ¿A quién quieres?
-No sé, ¿a quién se la habéis gastado ya?
-A David y a Carlos, que siempre nos gastaba bromas a nosotros y decidimos vengarnos.
-Pues escojo a Dani -le digo- Así me vengaré de él -digo riéndome como una malvada.
-Le has cogido manía, sí señor. Espero que nunca te enfades conmigo, si no, estoy perdido. -ambos nos reímos.
-Allí es -dice señalando una mesa en la que están las camisetas y el merchandising.
Ambos nos acercamos. No hay mucha gente, unos dos o tres, por suerte, llevamos gafas de sol y una gorra, por lo que esperamos no ser reconocidos.
-Hola -saludo.- Tres camisetas de la talla M, por favor. -pido, intentando disimular la voz.
-Enseguida -me dice uno de los encargados.
Veo un colgante que me enamora. Se puede leer: 'My Camp Auryn 29/30/31 agosto 2013', decido pedirlo, también. Ya de paso, aprovecho para comprarme el CD de nuestro último single 'Make My Day'.
-Pues serían... veintitrés euros, por favor. -me dice el chico.
-Esto... yo... -me levanto un poco las gafas de sol.
-Como tiene la suscripción VIP, no necesitará pagar nada. -añade, disimulando- Aquí tiene. -dice pasándome una bolsa.- Adiós y gracias.
-A ti -añado una sonrisa.- Adiós.
Me doy la vuelta y Blas y yo, volvemos a nuestro bungalow.
-No sé cómo te las arreglas para no ser reconocida. Hasta has disimulado la voz -me dice.- ¿Cómo lo haces? Yo voy a la bolera y me acosan.
-Pero si en el fondo te gusta -le digo.
-Claro que me gusta -reconoce- Eso es que te admiran y te quieren. Lo que no me gusta es que gente que no sepa quién eres ni a qué te dedicas, es decir, que sólo hayan escuchado tu nombre, te pida una foto o un autógrafo. Eso lo odio.
-Ya, y yo también. Lo hacen para fardar. Dani fue al concierto de Barcelona o de Madrid del grupo One Direction, ¿no? -pregunto.
-Creo que sí, ¿por?
-Una amiga de una chica de Málaga que conozco, fue al concierto y se encontró a Dani. Le pidió una foto y Dani le dijo que sí. Después, la chica se puso a fardar de que tenía una foto con Dani de Auryn, aunque en realidad le importaba una mierda Dani. Sólo quería la foto para fardar de que se había hecho una foto con alguien famoso.
-Pues lo veo una estupidez. Lo que ha hecho esa chica, me refiero. Si no le gusta nuestro grupo... Es una tontería.
-Y ya no es que no le guste, es que dice que somos una copia barata de One Direction. -estas palabras duelen. Si me dolía antes cuando los amaba con locura, más me duelen ahora, porque me llaman copia barata de un grupo que no tiene nada que ver con nosotros. Sí, nuestro estilo de música es el mismo, pero ahí se queda. ¿O acaso One Direction cantan en español?- ¿Lo sabías? -pregunto.
-¿El qué?
-Lo de que nos llaman copias baratas.
-Sí -dice- Pero me da igual, sé que no lo somos, así que...
Llegamos al bungalow, me meto en el baño, me cambio de camiseta y me pongo la de My Camp Auryn, también me pongo el colgante. Salgo y saco el CD de la bolsa, lo meto en la maleta. También hay algo dentro de la bolsa, un papel con las actividades propuestas para My Camp Auryn.
-¿Sabes qué broma le vas a gastar a Dani? -me pregunta Blas.
-Mmmm, ¿tenéis espuma de afeitar? -pregunto.
-Yo he traído -me advierte-, porque como esperemos a que se la traiga Álvaro...
-¡Pues ya está! Cuando esté durmiendo, le echamos espuma en la mano, le hacemos cosquillas en la cara, y que levante la mano y se estampe la espuma en las narices.
-¡Dios! ¡Eres una basta! -exclama. Yo me río.
-Lo sé. Ten cuidadito conmigo, ¿eh? -le advierto entre más risas.
Dani, Álvaro y mi hermano entran en el bungalow.
-¡Dios! ¡Cómo está todo lleno de fans! -exclama mi hermano- ¡Me han reconocido y todo!
-¿Sí? -pregunto- ¡Qué bien! ¿Y qué ha pasado?
-Pues nada, me han pregunto qué hacía aquí y les he firmado algo y me he hecho fotos. -explica- Me quieren mucho.
-Es que es inevitable, hermanito. -digo abrazándolo.- Ah, os he traído las camisetas. Tomad -digo pasándole una a cada uno.
-¡Eh! ¡Ese colgante lo tengo yo! -exclama Dani- Bueno, yo tengo el de la primera edición de My Camp Auryn.
-¿Has comprado algo más? -pregunta Álvaro.
-El CD de Make My Day -digo- Siempre soy la última en conseguirlo todo.
-Pues que no te pase lo mismo con el álbum de cromos.
-¡Es verdad! ¿Cuándo sale a la venta? -pregunto.
-El nueve de Septiembre.
domingo, 20 de octubre de 2013
Capítulo 95
Capítulo 95
-¡Nena! Venga, arriba -me dice Eloy destapándome.
-Déjame -digo poniéndome la almohada sobre la cabeza- Tengo sueño, ayer me acosté muy tarde.
-Hoy es My Camp Auryn -dice cerca de mi oído.
Esas palabras hacen que: salte de la cama, vaya a la cocina, coja una galleta, me la meta en la boca, vuelva a mi habitación, haga la cama, saque la maleta del armario y vaya metiendo ropa.
-¡Me podías haber avisado antes! -digo mirando el reloj- Son las doce menos veinte. ¡El autobús se nos ha ido ya! -exclamo.
-Pero, ¿a que hora salía el autobús? -pregunta.
-¡A las diez y media!
-Vaya... ¿Qué hacemos ahora? -pregunta. No espera mi respuesta- Métete en twitter y avisa a los chicos.
-Voy...
Cojo mi móvil y entro en twitter.
-Ve haciéndome la maleta, anda. Mete el cargador, los auriculares y demás. -le indico.
-¡Nena! Venga, arriba -me dice Eloy destapándome.
-Déjame -digo poniéndome la almohada sobre la cabeza- Tengo sueño, ayer me acosté muy tarde.
-Hoy es My Camp Auryn -dice cerca de mi oído.
Esas palabras hacen que: salte de la cama, vaya a la cocina, coja una galleta, me la meta en la boca, vuelva a mi habitación, haga la cama, saque la maleta del armario y vaya metiendo ropa.
-¡Me podías haber avisado antes! -digo mirando el reloj- Son las doce menos veinte. ¡El autobús se nos ha ido ya! -exclamo.
-Pero, ¿a que hora salía el autobús? -pregunta.
-¡A las diez y media!
-Vaya... ¿Qué hacemos ahora? -pregunta. No espera mi respuesta- Métete en twitter y avisa a los chicos.
-Voy...
Cojo mi móvil y entro en twitter.
-Ve haciéndome la maleta, anda. Mete el cargador, los auriculares y demás. -le indico.
'Mi hermano me ha levantado tarde y hoy es MCA ¿Algún voluntario para llevarme? @DaniAuryn @CarlosAuryn @BlasAuryn @DavidAuryn @AlvaroAuryn'
Al rato me responde Dani:
'@CoralAuryn Eso, eso, tú echale la culpa a tu hermano. Pobrecillo, con lo que te tiene que aguantar...'
Decido responderle:
'@DaniAuryn Más te he tenido que aguantar yo con la gira... :p'
Una chica se mete en la conversación y escribe:
'@CoralAuryn @DaniAuryn Los que se pelean, se desean'
Es entonces cuando Álvaro escribe:
Después de que se gasten bromas entre ellos, escribo un tweet:
'Nada de voluntarios, pos aquí me quedo :('
Dani me responde con un:
'@CoralAuryn Venga tardonaaa, que me paso a recogeros. Ponte guapa, ¡pero no tardes!'
'@DaniAuryn bien!! Yo siempre estoy guapa, así que no tengo que hacer gran cosa :p jejej'
Termino de preparar la maleta. Meto mi traje de hawaiana, mi cámara de fotos y mi neceser con cepillo de dientes, cepillo para el pelo, etc.
Mi hermano preparó la suya anoche, por lo que ahora pone al día su perfil de twitter. Al rato, suena mi móvil. Es Dani. Lo descuelgo y me limito a decirle: 'Ya vamos'. Sin esperar su respuesta, cuelgo y obligo a mi hermano a levantarse de la silla, a coger su maleta y a salir de casa.
Carlos y María José se fueron a las nueve, o eso es lo que me ha dicho mi hermano, nos montamos en el coche de Dani y vamos camino a El Escorial escuchando Anti-héroes. Lo mejor para repasar las canciones para el concierto de esta noche.
Cuando llegamos, algunos auryners nos miran y se emocionan. Nos acercamos a ellas y les abrazamos y nos hacemos fotos. Les tenemos que decir que debemos irnos, para instalarnos y tal. Lo entienden perfectamente y nos dejan marchar. Algunas están casi llorando, supongo que tiene que ser muy emocionante estar tan cerca de tus ídolos. Yo ya me he acostumbrado, así que lo veo un poco loco, pero está guay. Mientras no se vuelvan locas del todo...
Busco en una lista mi nombre y mi color: Coral Herrero Corpas......Rosa
¿Rosa? Supongo que lo habrán puesto adrede, para que a ninguno de los demás les toque el rosa. Me voy a nuestro bungalow y deshago la maleta.
El bungalow normal tiene cinco camas, pero el nuestro tiene ocho: Álvaro, Blas, Carlos, Dani, David, María José, mi hermano y yo. Son cuatro literas.
A mi hermano y a mí nos han dejado un cartelito para la litera. Él duerme arriba y yo abajo porque cuando duermo, ruedo, y no me quiero caer. Estas literas me recuerdan a cuando era pequeña y mi hermano dormía encima mía. María José tiene un cartelito en la litera de abajo, como yo, encima suya duerme Carlos. Blas duerme encima de David y a Dani le han dejado un cartelito en la litera de abajo. Encima va Álvaro.
-Jo -dice entristecido- Yo quería arriba. -se lamenta- Bueno, lo cambio y aquí no ha pasado nada -dice.
Justo cuando pone la mano encima del cartel, Álvaro entra por la puerta y se tira encima de él.
-¡Yo voy arriba, cabrón! -bromea.
Mi hermano y yo nos miramos y sonreímos. Después de estar un rato así, Dani se rinde y Álvaro se levanta de encima suya.
-Hola, Álvaro -le saludo con un abrazo.
-Ay, mi pequeña -dice- ¿Preparada para tu primer My Camp Auryn?
-Súper, súper preparada -le digo.
-Bien. Ya estabais tardando mucho. -dice.
-Bueno... Mi hermano me ha despertado tarde, así que...
Mi hermano agacha la cabeza, tímido.
-¿Sabes si han llegado ya Blas o David?
-Blas sí ha llegado. Está dándole una vuelta a las instalaciones con María José y con Carlos. David viene en el autobús, así que vendrá un poco más tarde.
-Ah, vale. ¿Sabes? Mañana es el cumple de Mariajo, les he encargado una tarta a los del restaurante. Para celebrarlo. Va a ser muy grande. En plan, para todos los asistentes. Le cantaremos cumpleaños feliz, ¿no?
-¡Claro!
sábado, 19 de octubre de 2013
Capítulo 94
Capítulo 94
-¡Eres un salido! -exclamo.
-Oh, venga ya, ¿yo soy el salido? -pregunta tranquilo sin apartar la vista de la carretera.- Has sido tú la que está con David y se deja besar por mí.
-¿Que me dejo? ¡Pero si has sido tú el que se ha lanzado! -exclamo.
-Sí -reconoce- Y tú has sido la que se ha quedado con ganas de más.
-¡¿Pero qué dices?! No me he quedado con ganas de más, en absoluto. -miento.
No es que me haya quedado con ganas de más, pero sí es verdad que me ha gustado bastante.
-Ya, claro.
-Mira, no quiero discutir, así que vamos a olvidar lo que ha pasado y punto.
-¿Ves como tenía razón?
-Pff
Me limito a responder con eso porque no quiero que nos peleemos, y como se entere David, será mejor que Dani desaparezca del mapa.
Pasamos el resto del camino sin hablar, escuchando la radio. Termina la canción de Roar, Katy Perry, lo que me hace pensar en Carlos y en María José. Se quedaron en casa con David. David.... ¿Seguirá allí o se marchó? Recuerdo que no lo vi, por lo que no me pude despedir de él. ¿Se habrá ido enfadado? ¿Y celoso? Dios, espero que no se haya ido a beber o a fumar. Me dijo que estaba mejorado, pero se pueden tener deslices, ¿no?
-Bueno, ya hemos llegado -dice Dani parando enfrente de mi portal.
-Vale. Gracias, Dani.
-De nada. ¿Paso mañana a recogerte para My Camp Auryn?
-No, no hace falta, de verdad. -le digo.
-No me importa, ¿eh? Si quieres, te llevo.
-No, de verdad. Voy a ir con mi hermano en el autobús. Ya tenemos los billetes.
-Ah, bueno, si tienes los billetes...
-Adiós -me despido bajándome del coche.
-Adiós, buenas noches.
-Buenas noches.
Me acerco al portal y, reflejado en el cristal, veo que Dani todavía no se ha ido. Decido actuar como si no estuviera allí, así que busco las llaves en el bolso y las meto en la cerradura. Entro, y cierro la puerta.
Nada más llegar a casa, decido sacar mi móvil y llamar a David.
-¿Estabas dormido? -pregunto.
-No, estaba listo para acostarme.
-Ah, lo siento.
-No te preocupes, princesa, me gusta escuchar tu voz. -dice dulcemente.- ¿Cómo está Lorena? Me fui porque no quería entretenerte y a mí los hospitales...
-Está bien. Bueno, se enteró de que su marido había fallecido y se puso histérica, aunque es normal.
-Ya. Mañana My Cap Auryn, ¿no?
-Sí -digo sonriendo.- ¿De qué vas a ir disfrazado?
-Ah, secreto. ¿Y tú?
-¿Esperas que te diga de lo que voy a ir disfrazada sin que tú me lo digas? -pregunto, no espero su respuesta- Pues vas listo.
-Jo, que yo lo quería saber -dice con tono de fastidia.
-Y yo también. Así que, ¡hala, hala! A dormir, que ya te enterarás mañana.
-¡Anda, rima! -exclama.
-¡Madre mía, cómo está el personal! En fin, buenas noches.
-¡Oye! ¿Dani está enfadado o algo? Ya sabes, por lo que le dije.
Mmmm ¿Cómo le puedo decir que estaba triste hasta que le animé sin que se imagine algo?
-Bueno, estaba tristón, pero parece que se le ha pasado. Aunque si fuera tú, le pedía perdón. -le aconsejo.
-Sí, a mí también se me ha ocurrido. Se lo diré mañana. Buenas noches, princesa, sueña con los angelitos.
-Con angelitos, no sé, pero con pastelitos... -dejo la frase sin acabar- Buenas noches.
-Soñaré con sirenas y tú serás una de ellas.
Se me pasa por la cabeza decir lo de ¡Rima!, pero creo que estropearé un momento muy romántico, así que guardo las ganas en un cajón.
-No lo dudaba. Buenas noches, príncipe.
-¡Eres un salido! -exclamo.
-Oh, venga ya, ¿yo soy el salido? -pregunta tranquilo sin apartar la vista de la carretera.- Has sido tú la que está con David y se deja besar por mí.
-¿Que me dejo? ¡Pero si has sido tú el que se ha lanzado! -exclamo.
-Sí -reconoce- Y tú has sido la que se ha quedado con ganas de más.
-¡¿Pero qué dices?! No me he quedado con ganas de más, en absoluto. -miento.
No es que me haya quedado con ganas de más, pero sí es verdad que me ha gustado bastante.
-Ya, claro.
-Mira, no quiero discutir, así que vamos a olvidar lo que ha pasado y punto.
-¿Ves como tenía razón?
-Pff
Me limito a responder con eso porque no quiero que nos peleemos, y como se entere David, será mejor que Dani desaparezca del mapa.
Pasamos el resto del camino sin hablar, escuchando la radio. Termina la canción de Roar, Katy Perry, lo que me hace pensar en Carlos y en María José. Se quedaron en casa con David. David.... ¿Seguirá allí o se marchó? Recuerdo que no lo vi, por lo que no me pude despedir de él. ¿Se habrá ido enfadado? ¿Y celoso? Dios, espero que no se haya ido a beber o a fumar. Me dijo que estaba mejorado, pero se pueden tener deslices, ¿no?
-Bueno, ya hemos llegado -dice Dani parando enfrente de mi portal.
-Vale. Gracias, Dani.
-De nada. ¿Paso mañana a recogerte para My Camp Auryn?
-No, no hace falta, de verdad. -le digo.
-No me importa, ¿eh? Si quieres, te llevo.
-No, de verdad. Voy a ir con mi hermano en el autobús. Ya tenemos los billetes.
-Ah, bueno, si tienes los billetes...
-Adiós -me despido bajándome del coche.
-Adiós, buenas noches.
-Buenas noches.
Me acerco al portal y, reflejado en el cristal, veo que Dani todavía no se ha ido. Decido actuar como si no estuviera allí, así que busco las llaves en el bolso y las meto en la cerradura. Entro, y cierro la puerta.
Nada más llegar a casa, decido sacar mi móvil y llamar a David.
-¿Estabas dormido? -pregunto.
-No, estaba listo para acostarme.
-Ah, lo siento.
-No te preocupes, princesa, me gusta escuchar tu voz. -dice dulcemente.- ¿Cómo está Lorena? Me fui porque no quería entretenerte y a mí los hospitales...
-Está bien. Bueno, se enteró de que su marido había fallecido y se puso histérica, aunque es normal.
-Ya. Mañana My Cap Auryn, ¿no?
-Sí -digo sonriendo.- ¿De qué vas a ir disfrazado?
-Ah, secreto. ¿Y tú?
-¿Esperas que te diga de lo que voy a ir disfrazada sin que tú me lo digas? -pregunto, no espero su respuesta- Pues vas listo.
-Jo, que yo lo quería saber -dice con tono de fastidia.
-Y yo también. Así que, ¡hala, hala! A dormir, que ya te enterarás mañana.
-¡Anda, rima! -exclama.
-¡Madre mía, cómo está el personal! En fin, buenas noches.
-¡Oye! ¿Dani está enfadado o algo? Ya sabes, por lo que le dije.
Mmmm ¿Cómo le puedo decir que estaba triste hasta que le animé sin que se imagine algo?
-Bueno, estaba tristón, pero parece que se le ha pasado. Aunque si fuera tú, le pedía perdón. -le aconsejo.
-Sí, a mí también se me ha ocurrido. Se lo diré mañana. Buenas noches, princesa, sueña con los angelitos.
-Con angelitos, no sé, pero con pastelitos... -dejo la frase sin acabar- Buenas noches.
-Soñaré con sirenas y tú serás una de ellas.
Se me pasa por la cabeza decir lo de ¡Rima!, pero creo que estropearé un momento muy romántico, así que guardo las ganas en un cajón.
-No lo dudaba. Buenas noches, príncipe.
miércoles, 16 de octubre de 2013
Capítulo 93
Capítulo 93
Después de estar un rato hablando, Lorena no puede evitar preguntar por su marido. Esta es la parte espinosa.
-Verás, Lorena, ha... -comienza Lucas.
-¿Muerto? -pregunta ella- No. No puede ser, es imposible. ¡Quiero verle! -exclama.- ¿Dónde lo tenéis? ¿Se ha ido con Aarón?
-No, Lorena, escucha, Aarón está bien, lo he estado cuidando, Coral me ha ayudado. No te preocupes por él. -le tranquiliza Lucas- Sin embargo, Luis no ha tenido tanta suerte como tú y ha fallecido...
-No puede ser -dice comenzando a llorar- Iros -murmura, ninguno de nosotros se mueve- ¡Que os vayáis! -exclama.
-Venga, chicos, será mejor que nos vayamos -dice Blas empujándonos hacia la puerta.- Vamos a dejarla sola esta noche, venid mañana a verla.
Salimos de la habitación del hospital y cerramos la puerta.
-Siento la reacción de mi hermana -se disculpa Lucas.
-No te preocupes, es normal -le tranquiliza Blas.- Será mejor que os vayáis y la dejéis sola. Por lo menos, hasta mañana.
-Yo debo irme, tengo que cuidar de Aarón, además de estudiar. Mañana vendré a verla. -dice Lucas.
-Nosotros no podremos. Tenemos que ir a My Camp Auryn, empieza mañana. -le informo- Quizá el día uno pueda venir, pero no lo sé.
-Bueno, no te preocupes.
Comenzamos a andar hasta el final del pasillo, cogemos el ascensor y bajamos a la planta de abajo.
-¿Te vas solo, Lucas? -pregunto al salir al exterior.
-No, está Ainhoa con Aarón allí, esperándome.
-Ah, vale. Bueno, hasta luego -digo dándole dos besos.
Él se va con Ainhoa, y Blas y yo, con Dani, que decidió esperar en el aparcamiento.
-Hola -digo sentándome en el asiento del copiloto.
-¿Ya? ¿Qué pronto habéis terminado, no? -pregunta Dani.
-Sí, es que se ha enterado de que su marido ha fallecido, entonces se ha puesto un poco hecha una furia. -informa Blas.
-Ah, vale. ¿A dónde vamos?
-A mi casa, ¿no? -pregunta Blas- A Coral la dejas después, que te pilla de camino.
-Ah, sí, claro, claro.
Durante el camino hablamos sobre My Camp Auryn. Yo estoy muy nerviosa, ya que va a ser el primer campamento en toda mi vida. Cuando era más pequeña no fui a ninguno porque no quería dejar a mi tío solo. Los chicos me van diciendo lo que tengo que meter en la maleta y me preguntan si tengo un disfraz. Claro que sí, aunque me dará un poco de vergüenza llevármelo. Es un disfraz de hawaiana. Resulta que mi hermano, fue a Hawai porque tuvo que ir a grabar no se qué cosa en una especie de fiesta, y le regalaron un collar, unas pulseras y una corona para la cabeza hecha de flores, y él me la regaló a mí. Después de eso, busqué una falda de hierba y, supongo que me pondré eso y la parte superior de un bikini marrón.
Intento sonsacarles qué disfraz llevarán cada uno, pero no me lo quieren decir. Esperan que sea sorpresa.
Sin darnos cuenta, hemos llegado a casa de Blas, que se despide de nosotros y se baja del coche.
La confianza de hace unos segundos se disipa de pronto, ninguno de los dos sabe qué decir o qué hacer, si comentar el beso o no. Sigo dándole vueltas a la cabeza, ¿por qué dejé que me besara? Sería porque él lo necesitaba, seguro, pero ¿me gustó? Es cierto que nos separamos porque escuchamos que venía María José, si no... ¿hubiéramos seguido con el beso? No lo sé.
-¿En qué piensas? -me pregunta.
-En nada -respondo encogiéndome de hombros.
-Piensas en el beso, ¿no? -pregunta sin apartar ni un segundo la vista de la carretera.- En por qué te lo he dado.
-Pues la verdad es que sí -reconozco.- ¿Por qué lo has hecho?
-Porque lo necesitaba -responde sin inmutarse.
-Pues no puedes ir por ahí besando a troche y moche con la excusa de que lo necesitas -le echo en cara.
-Habló -dice irónico- Que yo sepa, tú no te apartaste.
-Porque sabía que lo necesitabas.
-Sí, claro.
-Pues no te lo creas.
-Pues mira, no, no me lo voy a creer porque sé que mientes. -me dice.- Uno no se deja besar por hacerle un favor a otra persona.
-Eso no lo harás tú -le digo-, pero yo, sí.
-¿Te puedo pedir un favor? -pregunta.
-Dime -contesto, cansada.
Se acerca a mí y me besa. Otro beso suyo, dulce y cariñoso. Otra vez me he dejado camelar... No puede ser. Noto que él se aparta, y no puedo evitar quedarme con ganas de más. Parece que se ha dado cuenta, porque ahora responde con un simple:
-Conque un favor, ¿no?
Capítulo 92
Capítulo 92
-¡Qué chica más maja! -exclamo nada más salir de casa de mi vecina.- ¿Sabéis que va a ir a mi colegio?
-¿Cómo? ¿Vas a ir al colegio? -me pregunta David.
-Sí -respondo con una sonrisa- Me gustaría ir, y ya que va a ser mi último año...
-Ten cuidado, por favor -me pide- Por Auryn.
-Lo tendré, no te preocupes. -le tranquilizo.- Bueno, Dani, ¿qué te ha parecido la chica?
-Guapa, maja y un poco loca -sonríe.
-Tampoco está tan loca -digo quitándole importancia con la mano.
-Tiene veinte años y se ha puesto como una loca cuando nos ha visto -dice serio, pero con una expresión divertida.
Llegamos al ascensor y le damos al botón.
-Pues yo creo que pegáis -le digo.
-De todas maneras da igual. -dice- Es smiler, así que yo no le importo nada.
-No digas eso. Algunas prefieren a uno, pero si salen, salen con otro.
-Pero no me querrá como querría a Álvaro si estuviese con él. -dice agachando la cabeza.
El ascensor tarda demasiado, por lo que Álvaro y Carlos se van a sus respectivas casas por las escaleras (Carlos sube los dos pisos hasta llegar a la nuestra).
-¿Te vienes, David? -pregunto.
-¿Dónde?
-A mi casa a estar un ratillo.
-Vale. -dice encogiéndose de hombros.
-Pues eso, Dani, yo creo que pegáis -le digo mientras subimos en el ascensor. Él permanece callado.
Carlos ha entrado en casa y ha cerrado la puerta, yo no tengo llave, por lo que no puedo pasar.
-¡Carlos, abre! ¡No tiene gracia! -exclamo, cabreada- Como no me abras te hecho de casa.
-¡No puedes, ahora soy un okupa! -exclama desde dentro.
-¡Carlos! -exclamo, cabreada. En vista de que no me abre, me pongo a dar golpes en la puerta. Parece que eso tampoco funciona, por lo que cojo carrerilla para golpear fuerte la puerta, cuando él la abre y me cuelo dentro.- ¡Idiota! -exclamo
-Hombre, gracias. Esa sí que es una buena forma de decir buenas tardes.
-Tonto -musito.
-Hola, chicos -dice María José dándoles dos besos a cada uno- ¿Qué tal os ha ido?
-Bien. -se limita a responder David.
-¿Y Dani? ¿Era guapetona la chica o no? Contadme detalles. -pide.
-Normalita -dice, simplemente.
-¿Normalita? -pregunto con ironía- Era rubia con ojos azules, preciosa. Se llama Vicky -aclaro.
-¡Qué bien! Bueno, yo os he hecho unos pastelitos, pero, como no me han salido bien, he bajado a la confitería a comprarlos. -dice María José.
-Eso es mentira, es que me los he comido yo todos -dice Carlos frotándose la barriga- Eran de chocolate, muy ricos. -explica.
Nos vamos al sofá, ponemos la tele y nos sentamos a hablar.
-¿Y bueno, qué tal os va la vida? ¿Cuándo tendréis que volver a iros? -pregunta.
-El treinta y uno -responde Carlos- Te voy a echar de menos. -susurra.
-Y yo a ti. -responde ella.
-Te prometo que la noche del treinta, te voy a invitar a cenar a un sitio muy lujoso, ¿Quieres? -pregunta Carlos- Para despedirnos.
-Gracias, pero habrá que ir a My Camp Auryn, ¿no crees?
-Vaya, es verdad... ¿Te vale el uno de septiembre? -le pregunta.
-Claro que sí, mi niño.
-Dani, tú deberías despedirte de Vicky -le dice Blas.
-Por la cara, ¿no? -dice mirándolo incrédulo.
-Por la cara, no. Y no me mires así, ¿o me vas a negar que no estás enamorado hasta los huesos?
-Vaya, ahora eres un experto en el amor -dice frunciendo el ceño mientras sale de casa, cerrando de un portazo.
-David, te has pasado un poco -le digo.
-Solo he dicho la verdad -se defiende él.
-Voy a consolarle -digo ignorando las últimas palabras de David.
Salgo de casa y llego hasta el ascensor, justo cuando la puerta se cierra.
Por las escaleras, bajo corriendo hasta el piso número dos, el de la vecina, y le doy al botón del ascensor, después hago lo mismo con la planta primera y la planta baja, que da a la calle.
Al rato, Dani sale del ascensor.
-¿Qué? -me espeta- No tiene gracia.
-Nadie ha dicho que la tenga -le digo. Él sigue su camino bajando unas pequeñas escaleritas hasta llegar a la enorme puerta.- Vale, para. ¡Eh! Por favor -le pido.
Al oír esto, se para en seco y se gira. Yo bajo rápidamente los escalones y me pongo frente a él.
-Vente, ven -susurro abriendo los brazos. Él me abraza con fuerza, apoyando su cabeza en mi hombro.- ¿Te gusta? -pregunto pasándole mis manos por su pelo rubio, él asiente.- Podrías pedirle salir cuando la conocieras más.
-No puedo, me dirá que no, es smiler -dice sollozando.
-¿Y qué más da eso? -pregunto- Eres una gran persona, y fijo que ella lo sabe.
-No puedo.
-Pero, ¿te gusta de verdad? -le pregunto de nuevo.
-Sí. Ha bastado verla solo un segundo hoy para saber que podría ser la chica de mis sueños, pero, por otra parte...
-Por otra parte, ¿qué? -le pregunto separándolo de mí- ¿Hay algo que no te guste? ¿Tienes miedo de que te diga que no?
-Bueno, por otra parte... -dice mirando al suelo- Tú me gustas más, y te quiero mucho, demasiado.
-Lo sé -digo, dándole la peor respuesta que le he podido dar en mi vida- Pero sabes que yo no siento eso por ti.
-Sí. Y duele, mucho. -dice sentándose en el último escalón de la escalera, yo le acompaño.
-¿Quieres hablar? -le pregunto- No será fácil, pero podríamos intentarlo.
-De acuerdo -dice él- Cuando David dijo la parte de la chica perfecta... Sí, la había encontrado. Eras tú. Pero parece que es mejor persona contigo que él sólo, así que no quería decirlo, de todas maneras, os metería en una pelea, y no quiero que eso suceda otra vez. Ya tuvimos bastante con la última vez, y aún así sigue teniéndome manía, por lo que sólo empeoraría las cosas.
Hasta triste o enfadado (no sé cómo está ahora mismo, más bien triste, por su tono de voz) es un cielo.
Lo mínimo que puedo hacer es abrazarle.
-Encontrarás a la chica perfecta, ya verás, y seréis muy felices juntos. -le animo.
-Gracias. -dice sonriendo- Será mejor que me vaya -dice poniéndose de pie.
-Adiós -me levanto otra vez y voy hacia él. Le doy un beso en la mejilla- Cuídate. Ya le callaré la boca a David.
Él me coge la cara con ambas manos y me besa. Me besa dulcemente y, no se por qué, dejo que lo haga. Sé que lo necesita, pero no sé por qué lo hago yo. ¿Quizás necesite probar los labios de otro chico además de los de David? A lo mejor me gusta Dani y ni siquiera me he dado cuenta. Si nos vemos obligados a separarnos, es porque hemos escuchado una voz conocida.
-¡Coral! -dice María José bajando las escaleras como una loca- Era Ainhoa -dice enseñándome el móvil-, Lorena se ha despertado del coma. -me informa.- Le gustaría que fuéramos.
-Voy a cambiarme y ahora voy -le digo.
-Yo te llevo en el coche. Voy a sacarlo, no tardes mucho. -me dice Dani.
-Vale, ahora vengo. -digo subiendo las escaleras con Mariajo a toda prisa.
-A Blas también le gustaría ir -dice.
-¿A Blas? -pregunto. Me parece un poco raro, pero no se lo voy a negar. Si él quiere, que venga, a lo mejor le viene bien y todo.- Vale -digo con un tono de indiferencia.
-¡Qué chica más maja! -exclamo nada más salir de casa de mi vecina.- ¿Sabéis que va a ir a mi colegio?
-¿Cómo? ¿Vas a ir al colegio? -me pregunta David.
-Sí -respondo con una sonrisa- Me gustaría ir, y ya que va a ser mi último año...
-Ten cuidado, por favor -me pide- Por Auryn.
-Lo tendré, no te preocupes. -le tranquilizo.- Bueno, Dani, ¿qué te ha parecido la chica?
-Guapa, maja y un poco loca -sonríe.
-Tampoco está tan loca -digo quitándole importancia con la mano.
-Tiene veinte años y se ha puesto como una loca cuando nos ha visto -dice serio, pero con una expresión divertida.
Llegamos al ascensor y le damos al botón.
-Pues yo creo que pegáis -le digo.
-De todas maneras da igual. -dice- Es smiler, así que yo no le importo nada.
-No digas eso. Algunas prefieren a uno, pero si salen, salen con otro.
-Pero no me querrá como querría a Álvaro si estuviese con él. -dice agachando la cabeza.
El ascensor tarda demasiado, por lo que Álvaro y Carlos se van a sus respectivas casas por las escaleras (Carlos sube los dos pisos hasta llegar a la nuestra).
-¿Te vienes, David? -pregunto.
-¿Dónde?
-A mi casa a estar un ratillo.
-Vale. -dice encogiéndose de hombros.
-Pues eso, Dani, yo creo que pegáis -le digo mientras subimos en el ascensor. Él permanece callado.
Carlos ha entrado en casa y ha cerrado la puerta, yo no tengo llave, por lo que no puedo pasar.
-¡Carlos, abre! ¡No tiene gracia! -exclamo, cabreada- Como no me abras te hecho de casa.
-¡No puedes, ahora soy un okupa! -exclama desde dentro.
-¡Carlos! -exclamo, cabreada. En vista de que no me abre, me pongo a dar golpes en la puerta. Parece que eso tampoco funciona, por lo que cojo carrerilla para golpear fuerte la puerta, cuando él la abre y me cuelo dentro.- ¡Idiota! -exclamo
-Hombre, gracias. Esa sí que es una buena forma de decir buenas tardes.
-Tonto -musito.
-Hola, chicos -dice María José dándoles dos besos a cada uno- ¿Qué tal os ha ido?
-Bien. -se limita a responder David.
-¿Y Dani? ¿Era guapetona la chica o no? Contadme detalles. -pide.
-Normalita -dice, simplemente.
-¿Normalita? -pregunto con ironía- Era rubia con ojos azules, preciosa. Se llama Vicky -aclaro.
-¡Qué bien! Bueno, yo os he hecho unos pastelitos, pero, como no me han salido bien, he bajado a la confitería a comprarlos. -dice María José.
-Eso es mentira, es que me los he comido yo todos -dice Carlos frotándose la barriga- Eran de chocolate, muy ricos. -explica.
Nos vamos al sofá, ponemos la tele y nos sentamos a hablar.
-¿Y bueno, qué tal os va la vida? ¿Cuándo tendréis que volver a iros? -pregunta.
-El treinta y uno -responde Carlos- Te voy a echar de menos. -susurra.
-Y yo a ti. -responde ella.
-Te prometo que la noche del treinta, te voy a invitar a cenar a un sitio muy lujoso, ¿Quieres? -pregunta Carlos- Para despedirnos.
-Gracias, pero habrá que ir a My Camp Auryn, ¿no crees?
-Vaya, es verdad... ¿Te vale el uno de septiembre? -le pregunta.
-Claro que sí, mi niño.
-Dani, tú deberías despedirte de Vicky -le dice Blas.
-Por la cara, ¿no? -dice mirándolo incrédulo.
-Por la cara, no. Y no me mires así, ¿o me vas a negar que no estás enamorado hasta los huesos?
-Me la suda, paso de ella -dice Dani- Parece que va a lo que va, y ya está.
-Sabes que te lo estás inventando -dice Carlos.
-Hay más tías,más bluehearts, y más fáciles, encima.
-¿Ese es tu problema? ¿Qué es difícil? Te pasas la vida quejándote de que ninguna te produce nada, que son todas iguales, y cuando tienes a una que merece la pena y que realmente te gusta, no haces nada. -Hace una pausa para negar con la cabeza- Sabes perfectamente que puedes hablar, coquetear, besar o incluso tirarte a todas las que quieras, que las tienes a todas que son capaces de matar por ti, de caer rendidas a tus pies... Sabes que, a la hora de la verdad, es por ella por la que te vas a rayar, por la que te preguntas por qué eres tan gilipollas para no haberle pedido su número de teléfono y por qué la vida no te pone las cosas más fáciles.-Vaya, ahora eres un experto en el amor -dice frunciendo el ceño mientras sale de casa, cerrando de un portazo.
-David, te has pasado un poco -le digo.
-Solo he dicho la verdad -se defiende él.
-Voy a consolarle -digo ignorando las últimas palabras de David.
Salgo de casa y llego hasta el ascensor, justo cuando la puerta se cierra.
Por las escaleras, bajo corriendo hasta el piso número dos, el de la vecina, y le doy al botón del ascensor, después hago lo mismo con la planta primera y la planta baja, que da a la calle.
Al rato, Dani sale del ascensor.
-¿Qué? -me espeta- No tiene gracia.
-Nadie ha dicho que la tenga -le digo. Él sigue su camino bajando unas pequeñas escaleritas hasta llegar a la enorme puerta.- Vale, para. ¡Eh! Por favor -le pido.
Al oír esto, se para en seco y se gira. Yo bajo rápidamente los escalones y me pongo frente a él.
-Vente, ven -susurro abriendo los brazos. Él me abraza con fuerza, apoyando su cabeza en mi hombro.- ¿Te gusta? -pregunto pasándole mis manos por su pelo rubio, él asiente.- Podrías pedirle salir cuando la conocieras más.
-No puedo, me dirá que no, es smiler -dice sollozando.
-¿Y qué más da eso? -pregunto- Eres una gran persona, y fijo que ella lo sabe.
-No puedo.
-Pero, ¿te gusta de verdad? -le pregunto de nuevo.
-Sí. Ha bastado verla solo un segundo hoy para saber que podría ser la chica de mis sueños, pero, por otra parte...
-Por otra parte, ¿qué? -le pregunto separándolo de mí- ¿Hay algo que no te guste? ¿Tienes miedo de que te diga que no?
-Bueno, por otra parte... -dice mirando al suelo- Tú me gustas más, y te quiero mucho, demasiado.
-Lo sé -digo, dándole la peor respuesta que le he podido dar en mi vida- Pero sabes que yo no siento eso por ti.
-Sí. Y duele, mucho. -dice sentándose en el último escalón de la escalera, yo le acompaño.
-¿Quieres hablar? -le pregunto- No será fácil, pero podríamos intentarlo.
-De acuerdo -dice él- Cuando David dijo la parte de la chica perfecta... Sí, la había encontrado. Eras tú. Pero parece que es mejor persona contigo que él sólo, así que no quería decirlo, de todas maneras, os metería en una pelea, y no quiero que eso suceda otra vez. Ya tuvimos bastante con la última vez, y aún así sigue teniéndome manía, por lo que sólo empeoraría las cosas.
Hasta triste o enfadado (no sé cómo está ahora mismo, más bien triste, por su tono de voz) es un cielo.
Lo mínimo que puedo hacer es abrazarle.
-Encontrarás a la chica perfecta, ya verás, y seréis muy felices juntos. -le animo.
-Gracias. -dice sonriendo- Será mejor que me vaya -dice poniéndose de pie.
-Adiós -me levanto otra vez y voy hacia él. Le doy un beso en la mejilla- Cuídate. Ya le callaré la boca a David.
Él me coge la cara con ambas manos y me besa. Me besa dulcemente y, no se por qué, dejo que lo haga. Sé que lo necesita, pero no sé por qué lo hago yo. ¿Quizás necesite probar los labios de otro chico además de los de David? A lo mejor me gusta Dani y ni siquiera me he dado cuenta. Si nos vemos obligados a separarnos, es porque hemos escuchado una voz conocida.
-¡Coral! -dice María José bajando las escaleras como una loca- Era Ainhoa -dice enseñándome el móvil-, Lorena se ha despertado del coma. -me informa.- Le gustaría que fuéramos.
-Voy a cambiarme y ahora voy -le digo.
-Yo te llevo en el coche. Voy a sacarlo, no tardes mucho. -me dice Dani.
-Vale, ahora vengo. -digo subiendo las escaleras con Mariajo a toda prisa.
-A Blas también le gustaría ir -dice.
-¿A Blas? -pregunto. Me parece un poco raro, pero no se lo voy a negar. Si él quiere, que venga, a lo mejor le viene bien y todo.- Vale -digo con un tono de indiferencia.
martes, 15 de octubre de 2013
Capítulo 91
Capítulo 91
-¡Titi! -exclamo nada más bajar del escenario- ¡Cuánto tiempo sin verte! -digo abrazándolo.
-¡Madre mía, qué grande estás! -dice devolviéndome el abrazo.- Has cantado genial, mi niña. Eres toda una artista.
-Todo gracias a ellos, que me han enseñado mucho -digo señalando a mis componentes de grupo.
-Hola, chicos -saluda mi tío.
-Hola, esto... mmm -comienza Blas- ¡No me sé tu nombre!, así que...
-Manolo.
-Hola Manolo -saludan todos.
-A ver, ¿quién era el principito de mi pequeña? -pregunta él.
-Tío... -digo sonrojándome.
Todos miran a David, que agacha la cabeza y da un paso hacia delante.
-Soy yo -dice.
-Pues ven para acá que quiero tener una pequeña charla contigo -dice.- Los demás iros a jugar.
-¡Ni que tuviéramos cinco años! -exclamo.
-Pues a cantar, o lo que sea.
-No le irás a echar la bronca, ¿verdad? -pregunto, preocupada.
-Claro que no. -niega mi tío con la cabeza.
Como no sabemos a dónde ir, nos quedamos por aquí y mi tío se va con David un poco más lejos, para no enterarnos de su conversación. Mientras, aprovechamos para cotillear:
-¿Qué le irá a decir? -pregunta Álvaro.
-Ni idea -niego con la cabeza.
-No será lo que pasó de que se emborrachó cuando se enteró de que yo... -comienza Dani.
-No -le corto a mitad de la frase- Yo no se lo dije, así que... -miro a Eloy, él tampoco se lo habrá dicho, ¿o sí?
-A mí no me mires, que yo no he dicho nada.
-Estoy preocupada -reconozco.
Me distraigo mirando el recorrido que hace uno de los cables por el escenario y aprovecho para escuchar algunos gritos de algunas auryners histéricas. Yo también estaría histérica si hubiera venido a un concierto y estuviera en primera fila.
-Mira, sonríen -dice Blas.
Levanto la vista y, efectivamente, están sonriendo. Me relajo un poco. Parece que ya casi han acabado, por lo que mi tío le da unas palmaditas en la espalda y vuelven con nosotros. Al momento, viene Magí:
-Chicos, ha pasado una cosa terrible -nos anuncia.
-¿El qué? -pregunto, preocupada.
-Los organizadores del concierto, aquí, en Antequera, no han sido muy razonables, por lo que una auryner ha salido herida. -nos explica.
-¿Cómo? -preguntamos con la boca abierta.
-Sí -continúa- Resulta que antes, cuando habéis bajado del coche, había muchas chicas en la fila del concierto, ¿no? Pues a una de ellas le dio un ataque de nervios porque se cayó y la aplastaron. Entonces, ella necesitaba un medicamento y los organizadores no la dejaron pasar pensando que iba a colarse dentro. La pobre chica está muy enfadada, no con vosotros, si no con los organizadores del concierto.
-Vaya... ¿La podemos ver, por favor? -pide Álvaro.
-Sí, claro. Está en vuestro camerino, María José y Ana le han dado una Coca-Cola.
-Vamos, vamos -dice David.
-Titi, ahora nos vemos -le digo- Eloy, quédate con él.
-Vale, vale -él asiente.
Andamos bastante rápido hasta llegar a nuestro camerino, donde está la chica, con cara de haber llorado y una lata de Coca-Cola en la mano. Nada más entrar, Álvaro va hacia ella y la abraza. Es smiler.
-Hola, ¿Qué tal? -pregunta él, con un tono de voz nada bueno.- ¿Qué ha pasado?
-Pues que me han aplastado y he pedido permiso para ir a por mi medicamento, pero no me han dejado. Creían que me iba a colar o algo así -dice mientras unas lágrimas asoman por su cara.
-Eh, venga, no llores. -dice David- Si tú lloras, nosotros lloramos.
-Y si tu sonríes, nosotros sonreímos -completo.
Esto hace sacarle una sonrisa.
-¿Quieres que nos hagamos una foto? -pregunta Dani.
-Sí, por favor -pide la chica.
Todos nos ponemos alrededor de ella y nos hacemos unas fotos. Al momento viene Magí.
-Chicos, tenéis que salir a haceros fotos con las auryners, están esperando. Y, esto, me temo que tú también deberás irte, María.
-Vale -responde la chica- Muchísimas gracias, chicos.
-A ti por estar siempre ahí, preciosa -dice Carlos- Lo sentimos mucho.
-No importa, de todas maneras, no ha sido culpa vuestra.
La chica se va y nosotros nos preparamos para hacernos las fotos con las auryners.
Mientras estamos en un pequeño escenario, me doy cuenta de lo mal que tratan a los y a las auryners: con muchas prisa. Sí, tienen que hacerlo deprisa porque nos tienen que hacer la foto con todos, pero lo podían hacer con más delicadeza.
Al rato, llega la chica de antes con dos amigas más. Inmediatamente, Álvaro la consuela abrazándola.
domingo, 13 de octubre de 2013
Capítulo 90
Capítulo 90
-¡María José, ya estoy aquí! -exclamo nada más entrar a casa- María José, ¿dónde estás? -pregunto.
Nada. No hay respuesta. Quizás estén en la habitación. Entro al salón y veo una nota:
Parece que hoy estoy sola para almorzar. ¿Y si llamo a mi pastelito? Marco su número de teléfono y a los dos tonos de llamada, lo descuelga.
-Hola princesita -me saluda.
-Hola. ¿Dónde estás?
-En casa. ¿Qué ha pasado? ¿Estás bien?
-Sí, tranquilo. Lo que pasa es que estoy sola para almorzar y me preguntaba si querrías venir a hacerme compañía. ¿Estás ocupado o algo?
-No. No estoy haciendo nada. Reviso mi twitter, ya está. Los auryners me petan el conecta.
-Entiéndelo, te quieren mucho, es inevitable. -respondo.
-¿Tú también me petabas el conecta?
-No mucho. Me daba vergüenza -confieso. Él suelta una carcajada- ¡No te rías!
-Osea que, ¿tenías twitter y no intentabas que te respondiera? -pregunta, supongo, con una sonrisa.
-Sí... -admito.
-Pues vaya...
-Bueno, ¿entonces te vienes y comemos en casa o qué? -pregunto para cambiar de tema.
-Vale, pero no prepares nada, lo hago yo.
-¿Te vas a hacer cocinero como Blas? ¡Miedo me das!
-Muy graciosa. Venga, voy para allá. Estaré en una media hora o así.
Perfecto. Así organizaré un poco la casa y no se dará cuenta de que soy una desordenada.
-Mientras, tú organiza un poco la casa -me dice.
-Está organizada -miento.
-No. No lo está y lo sabes muy bien. -suelta una última carcajada- Adiós, princesa. Ahora nos vemos.
-Hasta ahora.
Parece imposible que, en unos veinte minutos, consiga barrer y fregar toda la casa y pasar la aspiradora. Además de quitar el polvo acumulado por los días de gira en los que no he podido limpiar nada. Obviamente, Ainhoa tampoco ha podido porque estaba cuidando de Arón en casa de Lucas. Esos dos pasan demasiado tiempo juntos. Parece que ellos son los padres, aunque Lorena esté en coma. Sería una pena que Lorena muriese, es joven, tiene unos veinticuatro años y ahora está sola. Sola y en coma. El telefonillo me sorprende mientras estoy subida en la silla quitando el polvo de la última balda de la estantería. No puede haber llegado tan rápido, ¿no?
Bajo corriendo de la silla y llego hasta la entrada.
-¿Sí? -pregunto por el telefonillo.
-Hola, Coral.
-¿David? ¿Eres tú? -pregunto.
-No, soy Blas. Esto... ¿puedo subir? -pregunta.
-Sí, claro, te abro. -digo pulsando el botón.
Recojo un poco todos los productos de limpieza y me quito los guantes amarillos que no tengo más remedio que usar si no quiero dañarme las manos. Lo justo para que ya esté Blas tocando el timbre.
-Hola, Blas. ¿Qué tal? -pregunto.
-Bueno... ahí. -dice con una cara bastante larga.
-¿Qué te pasa? Tienes mala cara.
-Mi novia me ha puesto los cuernos.
La boca se me abre completamente. ¿Novia? ¿Cuernos? Más impresionada por la parte de cuernos que por la de novia.
-¿Tienes novia? -pregunto.
-Tenía -dice- Siento venir sin avisar, pero me tenía que desahogar con alguien. ¿Te importa que me quede?
-No, claro. David va a venir a comer conmigo. Puedes quedarte también, no importa.
Sinceramente, preferiría que David y yo estuviéramos solos, pero tengo la sensación de que Blas realmente necesita nuestra ayuda.
-Estoy muy mal -reconoce.
-Anda, ven y me cuentas. -digo llevándolo hasta el sofá.
En ese momento me lo cuenta todo: Blas y la chica estaban celebrando su aniversario de cinco meses juntos en un restaurante la noche anterior, Blas no fue a celebrar la nominación por pasar un tiempo con su chica. Terminaron de cenar y se fueron a casa de la chica, Blas quería que pasara algo, pero la chica estaba muy rara, por lo que no pasó nada. A la mañana siguiente, la chica estuvo hablando con alguien por teléfono, y cuando vio a Blas despierto, la chica colgó rápidamente el teléfono y le dijo a Blas que lo llevaría a su casa. Blas aceptó un poco extrañado y cuando llegaron al portal de su casa, la chica paró el coche y le confesó que le había estado engañando con otro. Fue entonces, cuando Blas le preguntó el por qué y la chica no supo qué contestar. Al no recibir respuesta, se cabreó y se bajó del coche cerrando la puerta con fuerza. Esa fue la imagen que vi. Se metió en su casa y, hasta me confiesa, que se tiró en la cama a llorar.
-Oh, Blas -murmuro, mientras le abrazo- Lo siento, mucho. -Noto cómo se sorbe la nariz, está llorando.- Venga, ya está, tú tranquilo.
-Que yo la quería mucho -solloza mientras apoya su cabeza en mi hombro.
-¿Sabes? -digo separándole de mí- Si te engañó, no deberías estar triste, debería ser ella la que esté destrozada porque ha perdido a una de las mejores personas del mundo.
-¿Tú crees? -pregunta secándose las lágrimas.
-Claro que sí. Ella se lo pierde. Seguro que tú encontrarás a alguien mucho mejor, ya verás. -le animo.
-Gracias -dice abrazándome y sonriendo- ¿Sabes? Te voy a llenar el hombro de lágrimas y mocos -dice sonriendo.
-No importa -digo riéndome- Pero prefiero que sean e lágrimas de alegría.
-Claro que son de alegría -dice- Tengo la mejor cantante del mundo consolándome ahora mismo.
-Pensé que, para ti, la mejor era Merche.
-A ver, esto... -intenta encontrar las palabras.
-Te he pillado -digo soltando una carcajada.
El telefonillo suena.
-Oh, ¡ese es David! -digo levantándome del sofá.- ¿David? -pregunto en el telefonillo- Te abro -pulso el botón.
-Bueno, será mejor que me vaya a casa.
-No, no, no -niego con la cabeza- Tú te quedas aquí y almuerzas con nosotros.
-Pero...
-¡Pero nada! -le interrumpo- Te quedas aquí y punto.
-Si no hay más remedio...
-¡María José, ya estoy aquí! -exclamo nada más entrar a casa- María José, ¿dónde estás? -pregunto.
Nada. No hay respuesta. Quizás estén en la habitación. Entro al salón y veo una nota:
'Carlos se ha mejorado y hemos ido a comer algo por ahí. Vendremos tarde, no nos esperes despierta. Besos, MJ y C'
Parece que hoy estoy sola para almorzar. ¿Y si llamo a mi pastelito? Marco su número de teléfono y a los dos tonos de llamada, lo descuelga.
-Hola princesita -me saluda.
-Hola. ¿Dónde estás?
-En casa. ¿Qué ha pasado? ¿Estás bien?
-Sí, tranquilo. Lo que pasa es que estoy sola para almorzar y me preguntaba si querrías venir a hacerme compañía. ¿Estás ocupado o algo?
-No. No estoy haciendo nada. Reviso mi twitter, ya está. Los auryners me petan el conecta.
-Entiéndelo, te quieren mucho, es inevitable. -respondo.
-¿Tú también me petabas el conecta?
-No mucho. Me daba vergüenza -confieso. Él suelta una carcajada- ¡No te rías!
-Osea que, ¿tenías twitter y no intentabas que te respondiera? -pregunta, supongo, con una sonrisa.
-Sí... -admito.
-Pues vaya...
-Bueno, ¿entonces te vienes y comemos en casa o qué? -pregunto para cambiar de tema.
-Vale, pero no prepares nada, lo hago yo.
-¿Te vas a hacer cocinero como Blas? ¡Miedo me das!
-Muy graciosa. Venga, voy para allá. Estaré en una media hora o así.
Perfecto. Así organizaré un poco la casa y no se dará cuenta de que soy una desordenada.
-Mientras, tú organiza un poco la casa -me dice.
-Está organizada -miento.
-No. No lo está y lo sabes muy bien. -suelta una última carcajada- Adiós, princesa. Ahora nos vemos.
-Hasta ahora.
Parece imposible que, en unos veinte minutos, consiga barrer y fregar toda la casa y pasar la aspiradora. Además de quitar el polvo acumulado por los días de gira en los que no he podido limpiar nada. Obviamente, Ainhoa tampoco ha podido porque estaba cuidando de Arón en casa de Lucas. Esos dos pasan demasiado tiempo juntos. Parece que ellos son los padres, aunque Lorena esté en coma. Sería una pena que Lorena muriese, es joven, tiene unos veinticuatro años y ahora está sola. Sola y en coma. El telefonillo me sorprende mientras estoy subida en la silla quitando el polvo de la última balda de la estantería. No puede haber llegado tan rápido, ¿no?
Bajo corriendo de la silla y llego hasta la entrada.
-¿Sí? -pregunto por el telefonillo.
-Hola, Coral.
-¿David? ¿Eres tú? -pregunto.
-No, soy Blas. Esto... ¿puedo subir? -pregunta.
-Sí, claro, te abro. -digo pulsando el botón.
Recojo un poco todos los productos de limpieza y me quito los guantes amarillos que no tengo más remedio que usar si no quiero dañarme las manos. Lo justo para que ya esté Blas tocando el timbre.
-Hola, Blas. ¿Qué tal? -pregunto.
-Bueno... ahí. -dice con una cara bastante larga.
-¿Qué te pasa? Tienes mala cara.
-Mi novia me ha puesto los cuernos.
La boca se me abre completamente. ¿Novia? ¿Cuernos? Más impresionada por la parte de cuernos que por la de novia.
-¿Tienes novia? -pregunto.
-Tenía -dice- Siento venir sin avisar, pero me tenía que desahogar con alguien. ¿Te importa que me quede?
-No, claro. David va a venir a comer conmigo. Puedes quedarte también, no importa.
Sinceramente, preferiría que David y yo estuviéramos solos, pero tengo la sensación de que Blas realmente necesita nuestra ayuda.
-Estoy muy mal -reconoce.
-Anda, ven y me cuentas. -digo llevándolo hasta el sofá.
En ese momento me lo cuenta todo: Blas y la chica estaban celebrando su aniversario de cinco meses juntos en un restaurante la noche anterior, Blas no fue a celebrar la nominación por pasar un tiempo con su chica. Terminaron de cenar y se fueron a casa de la chica, Blas quería que pasara algo, pero la chica estaba muy rara, por lo que no pasó nada. A la mañana siguiente, la chica estuvo hablando con alguien por teléfono, y cuando vio a Blas despierto, la chica colgó rápidamente el teléfono y le dijo a Blas que lo llevaría a su casa. Blas aceptó un poco extrañado y cuando llegaron al portal de su casa, la chica paró el coche y le confesó que le había estado engañando con otro. Fue entonces, cuando Blas le preguntó el por qué y la chica no supo qué contestar. Al no recibir respuesta, se cabreó y se bajó del coche cerrando la puerta con fuerza. Esa fue la imagen que vi. Se metió en su casa y, hasta me confiesa, que se tiró en la cama a llorar.
-Oh, Blas -murmuro, mientras le abrazo- Lo siento, mucho. -Noto cómo se sorbe la nariz, está llorando.- Venga, ya está, tú tranquilo.
-Que yo la quería mucho -solloza mientras apoya su cabeza en mi hombro.
-¿Sabes? -digo separándole de mí- Si te engañó, no deberías estar triste, debería ser ella la que esté destrozada porque ha perdido a una de las mejores personas del mundo.
-¿Tú crees? -pregunta secándose las lágrimas.
-Claro que sí. Ella se lo pierde. Seguro que tú encontrarás a alguien mucho mejor, ya verás. -le animo.
-Gracias -dice abrazándome y sonriendo- ¿Sabes? Te voy a llenar el hombro de lágrimas y mocos -dice sonriendo.
-No importa -digo riéndome- Pero prefiero que sean e lágrimas de alegría.
-Claro que son de alegría -dice- Tengo la mejor cantante del mundo consolándome ahora mismo.
-Pensé que, para ti, la mejor era Merche.
-A ver, esto... -intenta encontrar las palabras.
-Te he pillado -digo soltando una carcajada.
El telefonillo suena.
-Oh, ¡ese es David! -digo levantándome del sofá.- ¿David? -pregunto en el telefonillo- Te abro -pulso el botón.
-Bueno, será mejor que me vaya a casa.
-No, no, no -niego con la cabeza- Tú te quedas aquí y almuerzas con nosotros.
-Pero...
-¡Pero nada! -le interrumpo- Te quedas aquí y punto.
-Si no hay más remedio...
Capítulo 89
Capítulo 89
Me abro paso entre la gente y entro a secretaría.
-Hola, Coral, soy Emilio, el director del colegio. -me saluda- Encantado.
-Encantada. Gracias por sacarme de allí. Todavía no tengo pensado cómo actuar con la gente. Me gustaría que me tratasen como una persona normal, no digo que no me pidan autógrafos y tal, pero que no estén encima mía pidiéndome que les de la oportunidad de conocer a los demás y esas cosas. -me explico.
-Por eso no te preocupes, aquí somos bastante estrictos -al oír esto
me hecho a temblar. A ver si me quedan algunas asignaturas por culpa de la gira y tal- Si notas que alguien está demasiado encima tuya, nos lo dices. No podremos expulsarle, claro está, pero podremos darle un toque de atención. Y, si las fans son un problema, podemos ponerte en una clase a parte.
-No, no se preocupe, de verdad. Intentaré adaptarme. Respecto a lo de la privacidad...
-No podemos garantizarle que no abrirán la boca respecto a sus notas, novios o cosas así, pero puedo aconsejarle que no diga nada relacionado con eso, por lo que pueda pasar. Ya sabe que nosotros no estamos pendientes de todo lo que hacen o dicen nuestros alumnos. Lo que sí le podemos asegurar es disciplina.
-De acuerdo. Y, verá, este año, no podré acudir varias veces al centro por la gira, las nominaciones y demás, entonces, si pudiera hablar con los profesores y pedirles que me cambien algunos exámenes si estoy muy atareada, se lo agradecería mucho.
-Sí, claro, sin problema. Seguro que lo entenderán.
-También por mi hermano, que también quiere estar en el colegio. Hoy no ha podido venir.
-¿Su hermano?
-Sí, es cantante y, bueno, va a ser cámara de nuestra gira y demás, entonces... Se llama Eloy. -hago una pausa y pido un favor- ¿Habrá alguna posibilidad de que estemos en la misma clase?
-Sí. Si usted lo desea.
-Por favor, no me trate de usted. Sólo tengo quince años.
-En fin, como estás a otro nivel... Es decir, eres cantante, así que...
-Pues en el colegio seré una más. -digo.
-De acuerdo. Eso sí, necesitaré que me rellenes unos papeles que tu tío dejó a tu elección.
-Ah, otra cosa más, para la justificación de haber faltado a clase, ¿Qué hago? Porque mi tío estará en Alemania.
-¿Habrá algún problema si le pide la justificación a su mánager? -pregunta. ¿A Magí? Supongo que no habrá ningún problema. ¿Quién iba a imaginarse que Magí me haría las justificaciones para el colegio, como si fuera mi tutor legal? Niego con la cabeza- Pues perfecto. Aquí tiene los papeles, puede rellenarlos aquí, si quiere.
-No, gracias. Tendré que empezar a familiarizarme con los demás.
-¿Está segura? -me pregunta.
-Sí -asiento con la cabeza.
Salgo fuera y me siento en un pequeño banco, cojo mi carpeta y me apoyo sobre ella para rellenar algunos papeles que mi tío dejó sin rellenar. Son sobre materias optativas, así que supongo que hizo bien.
Numere del uno al cuatro, las siguientes materias en orden de preferencia:
Francés
Web
Laboratorio
Humanidades
En primer lugar, escojo 'Web', porque tiene pinta de ser cosas de informática, y no habrá exámenes, por lo que a la hora de estudiar, me será mucho más fácil.
En segundo lugar escojo 'Laboratorio' porque tiene pinta de ser cosas de formulitas y echar líquido azul en una botellita con líquido rojo y cosas así. En tercer lugar, escojo 'Francés', ya que un idioma extra a parte del inglés, me vendrá bien, y por último, escojo 'Humanidades' porque no tengo ni idea de lo que significa.
Enumere desde el uno al tres las siguientes materias en orden de preferencia:
Religión católica
Alternativa
Extraescolar
Supongo que, por extraescolares, habrá distintos: desde teatro hasta baile. Así que 'Extraescolar' se merece el número uno. Después escojo 'Alternativa' y, por último, 'Religión católica', ya que no me siento muy religiosa.
¿Ha recibido clases de cualquier tipo de baile fuera de su instituto? ¿En qué nivel está?
Escribo:
Sí. Recibí clases de ballet en una escuela profesional de danza. Alcancé el nivel nueve.
Después viene la última pregunta que tengo que rellenar:
Enumere, en orden de preferencia, las materias que desea realizar:
Fotografía
Refuerzo de matemáticas
Refuerzo de lengua
Refuerzo de inglés
El número uno, fotografía; el número dos, matemáticas; el tres, lengua; y el cuatro, inglés.
Me abro paso entre la gente y entro a secretaría.
-Hola, Coral, soy Emilio, el director del colegio. -me saluda- Encantado.
-Encantada. Gracias por sacarme de allí. Todavía no tengo pensado cómo actuar con la gente. Me gustaría que me tratasen como una persona normal, no digo que no me pidan autógrafos y tal, pero que no estén encima mía pidiéndome que les de la oportunidad de conocer a los demás y esas cosas. -me explico.
-Por eso no te preocupes, aquí somos bastante estrictos -al oír esto
me hecho a temblar. A ver si me quedan algunas asignaturas por culpa de la gira y tal- Si notas que alguien está demasiado encima tuya, nos lo dices. No podremos expulsarle, claro está, pero podremos darle un toque de atención. Y, si las fans son un problema, podemos ponerte en una clase a parte.
-No, no se preocupe, de verdad. Intentaré adaptarme. Respecto a lo de la privacidad...
-No podemos garantizarle que no abrirán la boca respecto a sus notas, novios o cosas así, pero puedo aconsejarle que no diga nada relacionado con eso, por lo que pueda pasar. Ya sabe que nosotros no estamos pendientes de todo lo que hacen o dicen nuestros alumnos. Lo que sí le podemos asegurar es disciplina.
-De acuerdo. Y, verá, este año, no podré acudir varias veces al centro por la gira, las nominaciones y demás, entonces, si pudiera hablar con los profesores y pedirles que me cambien algunos exámenes si estoy muy atareada, se lo agradecería mucho.
-Sí, claro, sin problema. Seguro que lo entenderán.
-También por mi hermano, que también quiere estar en el colegio. Hoy no ha podido venir.
-¿Su hermano?
-Sí, es cantante y, bueno, va a ser cámara de nuestra gira y demás, entonces... Se llama Eloy. -hago una pausa y pido un favor- ¿Habrá alguna posibilidad de que estemos en la misma clase?
-Sí. Si usted lo desea.
-Por favor, no me trate de usted. Sólo tengo quince años.
-En fin, como estás a otro nivel... Es decir, eres cantante, así que...
-Pues en el colegio seré una más. -digo.
-De acuerdo. Eso sí, necesitaré que me rellenes unos papeles que tu tío dejó a tu elección.
-Ah, otra cosa más, para la justificación de haber faltado a clase, ¿Qué hago? Porque mi tío estará en Alemania.
-¿Habrá algún problema si le pide la justificación a su mánager? -pregunta. ¿A Magí? Supongo que no habrá ningún problema. ¿Quién iba a imaginarse que Magí me haría las justificaciones para el colegio, como si fuera mi tutor legal? Niego con la cabeza- Pues perfecto. Aquí tiene los papeles, puede rellenarlos aquí, si quiere.
-No, gracias. Tendré que empezar a familiarizarme con los demás.
-¿Está segura? -me pregunta.
-Sí -asiento con la cabeza.
Salgo fuera y me siento en un pequeño banco, cojo mi carpeta y me apoyo sobre ella para rellenar algunos papeles que mi tío dejó sin rellenar. Son sobre materias optativas, así que supongo que hizo bien.
Numere del uno al cuatro, las siguientes materias en orden de preferencia:
Francés
Web
Laboratorio
Humanidades
En primer lugar, escojo 'Web', porque tiene pinta de ser cosas de informática, y no habrá exámenes, por lo que a la hora de estudiar, me será mucho más fácil.
En segundo lugar escojo 'Laboratorio' porque tiene pinta de ser cosas de formulitas y echar líquido azul en una botellita con líquido rojo y cosas así. En tercer lugar, escojo 'Francés', ya que un idioma extra a parte del inglés, me vendrá bien, y por último, escojo 'Humanidades' porque no tengo ni idea de lo que significa.
Enumere desde el uno al tres las siguientes materias en orden de preferencia:
Religión católica
Alternativa
Extraescolar
Supongo que, por extraescolares, habrá distintos: desde teatro hasta baile. Así que 'Extraescolar' se merece el número uno. Después escojo 'Alternativa' y, por último, 'Religión católica', ya que no me siento muy religiosa.
¿Ha recibido clases de cualquier tipo de baile fuera de su instituto? ¿En qué nivel está?
Escribo:
Sí. Recibí clases de ballet en una escuela profesional de danza. Alcancé el nivel nueve.
Después viene la última pregunta que tengo que rellenar:
Enumere, en orden de preferencia, las materias que desea realizar:
Fotografía
Refuerzo de matemáticas
Refuerzo de lengua
Refuerzo de inglés
El número uno, fotografía; el número dos, matemáticas; el tres, lengua; y el cuatro, inglés.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)