Capítulo 3

Capítulo 3

-Venga Coral, arriba- me dice mi tío zarandeándome el hombro. Abro los ojos y me desperezo-Buenos días.
-Buenos días, titi-saludo con una sonrisa.
-Venga vamos a desayunar, vas a llegar tarde a grabar el videoclip.
-¿Qué hora es?-pregunto, frotándome los ojos.
-Las diez.
¿Cómo? No voy a tener tiempo de arreglarme. Le explico que tengo que estar allí a las once e inmediatamente se disculpa.
-No lo sabía- se excusa- Lo siento.
-No importa, titi.
Me visto rápidamente y me peino el pelo liso castaño que me cae sobre los hombros.
Cojo mi bolso y abro la puerta para salir.
-¿No desayunas nada?-me pregunta mi tío.
-No, ya pillaré algo-respondo.- Adiós,titi.

Bajo en el ascensor y, en lugar de coger el autobús hasta Alicante, decido coger un tren con el que espero, llegaré antes.

                                                 *  *  *  *  *  *  *  *  *  *


-Hola, chicos- digo- Hola Magí
-Hola guapa. ¿Qué tal?- dice Magí dándome dos besos- Los chicos están ahí dentro. Eres la primera en llegar.
-¿En serio?-pregunto sonrojada- Madre mía, qué corte.
-Qué va, eso está muy bien. Aquí la puntualidad nos interesa mucho. Pasa- dice abriéndome la puerta.
-Gracias.

Nada más entrar a la sala, todos los chicos se levantan, mis héroes.
-Buenos días-digo con una de mis sonrisas.
-Vaya, que contenta vienes al trabajo-dice Álvaro- Buenos días- dice dándome dos besos rápidos.
-Hombre, es que este trabajo me gusta. Es uno de mis sueños.-respondo encogiéndome de hombros.
-Si supiera que la vamos a despedir...-dice Carlos por lo bajo.
Por un momento mi mundo se paraliza y se me queda una cara de asombro. ¿Por qué? ¿Era eso lo que me dijo ayer Blas que habían decidido? Carlos no puede evitar esbozar una sonrisa y ya comprendo que todo era una de sus bromas. Las graciosas bromas de Carlos.
-Era broma, hombre-dice Carlos- ¿Un abrazo?
-Déjame- le digo molesta, pero al igual que él, yo tampoco puedo evitar que una sonrisa asomase por mi cara.
-Buenos días-saluda Blas- ¿Qué tal?
-Bien ¿ y tú?
-Perfectamente-responde.
No cabe duda, para mí Blas era el más majo de todos, pero David... Había algo en él que me atraía.
No pienses en él, Coral. No tienes ninguna oportunidad. Él tiene veinticuatro años mientras que tú... sólo tienes catorce. Aunque...los piropos de ayer... y el cosquilleo que sentí. Tendrían que significar algo.
Todo esto lo pensé mientras Dani me saludaba y me daba dos besos. Todos son muy majos.
Por último, al igual que ayer, llegó el turno de David.
-Buenos días-dijo esbozando una de sus irresistibles sonrisas-Guau. Estás...fabulosa.
Ya están otra vez...las mariposas en el estómago y mis mejillas ruborizándose.
-Gracias-respondo tartamudeante- ¿Qué tal has dormido?
¡Mierda! ¿Cómo se te ocurre preguntarle eso? Tienes que ir a una tienda y pedir un filtro cerebro-boca para no cagarla más.
Al contrario que harían muchos otros chicos, o mejor dicho, niñatos, mi príncipe azul esbozó una tímida sonrisa y respondió con un simple:
-Muy bien, gracias.
¿Cómo puede ser tan perfecto? Es atractivo, majo, simpático, amable, cariñoso... El verdadero chico que cualquier chica quisiera tener. Pero debo dejar de ser tan tonta. Hay millones de auryners que desearían tenerle como novio o incluso como amigo, el puede elegir a la que quisiera, ¿por qué iba a fijarse en mí, una chica normal y con catorce años?
Al rato entra Magí diciendo que ya podemos ir a maquillaje y después a rodar.
-¿Cuánto durará el rodaje del videoclip?-pregunto sentada en una de las sillas de maquillaje
-Unos... tres días-responde Magí.
¡Perfecto! Tres días con auryn y con mi príncipe azul.
Cierro los ojos mientras me dan los últimos toques y, cuando los abro, veo reflejada en el espejo a mi príncipe azul.